Capitulo 55

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El Viejo Maestro del Palacio dijo: —Si solo fuera un rumor, por supuesto, no lo creeríamos tan fácilmente. Pero esta información provino de uno de los mismísimos miembros de su honrada secta —miró a su alrededor y continuó—. Todos deben saber que es común que los discípulos de cada secta formen amistades entre ellos, por lo que escuchar algunos rumores y chismes es inevitable. Sin embargo, la cuestión de los Señores de la Cumbre Shen y su maltrato y daño deliberados a los discípulos bajo su cuidado, lo hacen indigno de la frase "carácter moral noble e inmaculado".

La cabeza de Shen Yuan iba a doler.

¿Dañar a los discípulos bajo su cuidado?

—Ya que estás al tanto de que solo son rumores y chismes, ¿debes estar al tanto de que no ameritan discusión? —dijo solemnemente Yue Qingyuan—. Es cierto que a mis shidis por lo general no le gusta mimar a sus discípulos, pero acusarlos de hacerles daño es demasiado.

Luo Binghe also una ceja imperceptiblemente...

Shen Jiu escuchaba todo esto con aire tranquilo... observando todo tras el abanico. Si Lao Gongzhu queria jugar jugaría.. 

De repente, una voz suave y dulce habló. La joven maestra del palacio al lado de su padre finalmente no pudo soportarlo y tuvo que alzar la voz por su amado. —Entonces, puede esta humilde preguntarle al Líder de Secta Yue, ¿ordenarle a un joven en su adolescencia que se enfrente a un demonio mayor con cientos de años de entrenamiento y una armadura repleta de púas envenenadas, no cuenta como maltrato y daño?

Esta vez, Liu Qingge ya no pudo simplemente quedarse a un costado y escuchar.

" Ese día varios no estaban en la secta... Shen Yuan , Shen Jiu y yo estábamos en reclusión... a mi me dio una desviacion del Qi .... termine hiriendo a los hermanos.

Solo Shen Jiu salio a defender la secta... el solo, quizas habrian muerto más dicipulos...."

"Es cierto -aporto Yue Qingyuan,  ese dia habia salido y al regresar los heridos fueron escasos...este tipos de asuntos internos no deberían ser discutidos en público maestro Lao Gongzhu"

¿Qué opinas tú, Luo Binghe? —dijo Liu Qingge, ni resentido ni apacible.Frio

De todos los cultivadores presentes, algunos parecieron asombrados al escuchar este nombre. Muchos de ellos eran de la Secta de la Montaña Cang Qiong.
Incluso Yue Qingyuan quien no se habia topado mucho con Luo Binghe en su adolescencia no habia podido relacionar a ese apuesto joven al lado del Maestro del palacio... el siempre creyo que era Gongxy Xiao... ahora caia en cuenta que ese joven era Luo Binghe el amado dicipulo de los hermanos...

Pudo ver por sus propios ojos el duelo de los hermanos y anteriormente el cariño del dicipulo hacia sus maestros.

Desde la multitud, Luo Binghe miró fijamente a los Maestros Qingqiu, su mirada inquebrantable.

—La bondad que Shizun mostró al protegerme nunca , nunca la olvidaré —dijo lentamente Luo Binghe mirando a Shen Yuan. El reprimia las ganas de atacar a todos esos que estaban ensuciando la imagen de sus preciados maestros.

Liu Qingge dijo con incredulidad, —¿En verdad eres tú? Tu caiste al abismo—volvió a mirar a Luo Binghe—. Ya que estás vivo, ¿por qué no regresaste a la Cumbre Qing Jing? Acaso no sabes que, gracias a ti, tus shizun estaban fuera de...
Shen Jiu tosio fuertemente interrumpiendo lo que diria...

Es precisamente esto lo que es tan inexplicable —insistió el Viejo Maestro del Palacio—. Claramente no murió, entonces, ¿por qué insististe en que sí? ¿Y por qué estaba remiso a regresar cuando claramente tenía la opción de hacerlo?

Shen Yuan se hartó de su tono de mala fe. —Si estaba remiso regresar, no hay nada que nosotros podamos hacer. Puede ir y venir libremente como se le plazca, todo depende de él. Si el Maestro del Palacio desea decir algo, dilo sin rodeos.

Ciertamente Shen Yuan odiaba jugar con esto pero tenia que seguir el plan de su hermano.

Shizuns oberrecen el mal —dijo Luo Binghe—. Cuando se trata de demonios, solo odian que se le niegue la satisfacción de matarlos personalmente, entonces, ¿cómo podrían confabularse con ellos?

Esto parecía ser Luo Binghe defendiendo a los Qingqiu.Pero era una provocación.

Al no tener nada que perder, Shen Jiu fue directo a su punto. —Luo Binghe, en este momento, ¿eres un discípulo de la Cumbre Qing Jing, o un miembro del Palacio Huan Hua?

El Viejo Maestro del Palació hizo una mueca desagradable. —Después de todo esto, ¿están dispuesto, una vez más, a reconocer a este discípulo?

—Nunca lo expulsamos. Como todavía está dispuesto a llamarnos shizun, seguramente debe estar dispuesto a reconocernos como tal.

La mirada de Luo Binghe parpadeó mirando en dirección a ellos.

En un momento, la multitud se había dividido en dos campos claros, chispas volando por el aire, repletas de la hostilidad de una batalla inminente. En cuanto a los sembradores que habían comenzado toda esta guerra, ahora estaban a un lado, olvidados. A nadie le importaba ya cómo lidiar con ellos.

De repente, llegó la dulce y encantadora voz de una mujer. —Shen Jiu... ¿eres Shen Jiu?

Shang Qinghua Doble FazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora