El Secreto De Lee Félix [En Edición]

54

A mí me da igual si Minhyuk no es mi padre de todas maneras a quien le importaría si el nunca quizo emparentar conmigo.

Además mis recuerdos sobre él son vagos y lo que menos quiero es recordar cómo era, para mí es como si ya estuviese muerto.

A mi madre tampoco la conocí, las únicas personas que recuerdo son mi familia adoptiva las cuales me odiaron desde que aparecí en sus vida.

Yo nunca pedí que me dieran un hogar, ojalá me hubiera muerto en las calles como un perro sin tener que hacer sufrir a las pocas personas que conservo y las puedo llamar familia.

Ya solo faltaría que me saliera otro hermano o hermana por allí por parte de ambos pidiéndome ayuda—frustado—por que no puedo rehacerlo todo y comenzar de nuevo.

Mi vida gira en torno a esconderme para siempre sin poder disfrutar de aquello que una vez me hizo tan feliz... como Hyunjin.

—Félix—toco la puerta—se que no quieres vernos pero no me gusta que estés solo—preocupado al no escuchar nada tras la puerta—por favor ábreme si—insistiria lo que fuera.

—Vete—escucho desde el otro lado—no quiero verte ni a ti ni a nadie!.

—Vamos Lixie ábreme—golpeo un poco la puerta.

—Bueno ya!—abrio molesto—Solo dime lo que venías a decirme y vete—se sentó de espaldas en la cama

—Okey—tomo aire—Felix te estás comportando como un idiota y perdóname que te lo diga—pensaba en sí acercarse o no—Que pasó con aquel Félix al que le valía todo y sin importar que estuviera en aprietos salía a dar la cara burlándose de los demás.

—Esta muerto—anuncio bajito

—Cuando cambiaste?

—Minho mi vida cambió desde que el estúpido de Hyunjin se metió en mi vida y yo por idiota lo deje entrar aqui!—señalo su corazón una vez le dio la cara.

—Te arrepientes?.

—Claro que sí y ahora lo único que quiero es olvidarme de él como si jamás hubiera existido

—Esta bien—Comenzo a sacar un celular.

—Que haces?—confundido.

—Ten—Se lo entrego—marcale.

—A quién?—negandose al mismo tiempo.

—A Hyunjin para que lo olvides de una vez por todas sí eso es lo que quieres—anuncio seguro.

Observó el celular en la mano del contrario dudando en sí tomarlo ya que no quería hablar con el mayor.

Yacía mucho tiempo en el que le había dicho algo y a estas alturas de seguro no deseaba verlo.

Aún así pensó en que si el estaba haciendo su vida por qué mejor el no hacía lo mismo con la suya. Tenia que comenzar justo como lo hacían sus amigos.

Era cierto que antes se aventaba a todo lo que le proponían, por qué cambiar por alguien.

Él era él y eso jamás se podría borrar debía aceptarse tal como era así como en un principio.

—De acuerdo—le quitó el celular.

—Su número es este—dandole un papel—me lo dio Han ya que sabía lo ocuparía despues.

El peliazul lo observó de una forma en la que no estaba molesto pero no le agrada que le hubiese pedido a Han el número de su amigo.

Luego de ingresar los números marco tomando valor de donde fuera si esque contestaba alguien más o decían número equivocado.