Enamorado tuyo (ArgUru Countryhumans)

✨ Capítulo 1 ✨

✨ Narra Argentina ✨

– ¡¡La pu*a madre que llego tarde!!

Hola a todos, mi nombre es Argentina, y éste es un día normal en mi vida... 

¿No les pasa que cuando ponen la alarma, uno tipo dice "¡Ay! ¡Un ratito más...!"? Y pasan cinco... diez... quince minutos... y cuando querés acordar andan como yo, corriendo como un boludo para no llegar tarde.

Para colmo, es la primera reunión del año, ONU tenía la esperanza de que por lo menos empezáramos a tener un poQUIto de puntualidad (bien dice que la esperanza es lo último que se pierde, je...).

– ¡¡Weóooon!!

Miró pa' tras, y allá veo a un flaco colorado de patas largas corriendo atrás mío, lo reconocí enseguida...

– ¡¡¿Vos también Chile?! – le grité.

– ¡¡No escuché la alarma!!

– ¡¡Apurate que sino el sabés cómo se pone el viejo éste!!

Capaz a ustedes les parezca raro, pero Chile es mi amigo. Sí, ya sé que un dos por tres nos peleamos mal y a veces nos rompemos la jeta con unas buenas piñas, pero después andamos lo más bien y seguimos juntos como los buenos amigos que somos.

Volviendo a lo que estaba... ya más o menos transpirados, con la lengua afuera y con las piernas medias acalambradas, ¡llegamos!

Sólo un detallecito... Empujamos las puertas a lo bestia y se golpearon contra la pared, entonces todo el mundo se nos quedó viendo...

– Otra vez tarde Argentina y Chile... – suspiró ONU.

– ¡Disculpe ONU, no sabe lo brava que andaba la calle! – me excusé caminando hacia mi lugar.

– ¡Es lo mismo de siempre Argentina! ¡A ver si eres más responsable! ¡Lo mismo para ti Chile!

No le dí mucha pelota y me senté en mi lugar, no es la primera vez que ONU se retoba conmigo por las llegadas tarde, igual, ¡¿quién lo manda a hacer una reunión a las seis de la mañana?! ¡A esa hora no me acuerdo ni de quién soy!

Chile se sentó al lado mío, a mi derecha, mientras se arreglaba el traje negro y la corbata roja, de a rato se acomodaba su pelo azul.

Yo también aproveché para arreglarme la chaqueta negra y mi corbata celeste, me fijé si no ensucié el pantalón (aunque como es negro también ni se iba a notar), los zapatos estaban bien. Acomodé el cuello de la camisa blanca y puse unos cuántos mechones rubios en su lugar.

Mientras, ONU empezó a pasar lista de los países que estábamos, en eso, me acordé de alguien...

Y justo cuando se me da por mirar a mi izquierda, me doy cuenta que entre Brasil y yo había un asiento vacío... asiento que era de Uruguay.

– "¿Y vos dónde andás?" – pensé.

Disimuladamente empecé a mirar para todos lados, pero no, ¡no estaba!

La esperé un rato más por las dudas, y como no aparecía, saqué mi celular y la busqué en mis