Capitulo 51

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Capitulo 51

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Capitulo 51

La Sultana Hurrem ansiosa

Durante la madrugada se habían quedado dormidos aunque Mehmed no quería e incluso le rogó a Reyhan que lo dejara entrar en ella una y otra vez pero se quedo dormida entonces el pobre solo tuvo que conformarse con dormir con su miembro dentro de su feminidad...

El príncipe abrió sus ojos por la luz del sol que entraba por la ventana, bajo su mirada al sentir un peso en su pecho y vio a la persona mas hermosa de toda su vida que había imaginado, su flor mas bella de su jardín estaba junto a el, se le quedo mirando un rato que parecieron años hasta que escucho una risa ligera

–¿Qué hace príncipe?–pregunto Reyhan sonriendo– ¿Sabe? Es mejor tener un retrato de mi para que pueda apreciarlo por horas y cuando me extrañe 

–No lo creo...–carraspeo– Para mi es mejor tenerte de carne y de hueso que en un simple dibujo con lápices

Reyhan se levanta lentamente porque en su feminidad tenia un dolor–Es mejor que me tengas toda la vida, ¿No crees?

–Créeme que quiero que estemos en la misma religión pero solo si....–lo interrumpen– 

–Quiero convertirme al Islam...–suelta de golpe– Quiero todo contigo, ahora y siempre

–Yo también quiero estar contigo mi Reyhan–sonríe juntando su labios siendo correspondido al instante, se separa viendo su cuerpo– No puedo creer que todo eso me comí anoche–bromea–

Reyhan lo miro con el ceño fruncido– ¿Enserio dijiste eso?–le pega en el hombro– No puedo creer que lo hayas dicho

–¿Qué hay de malo? Es bueno apreciar lo que comí de postre–ríe y la besa–

El Sultán no estaba en el palacio, todos por alguna extraña razón lo estaban buscando y sobre todo la Sultana Madre que mando a llamar a Sumbul Aga, lo esperaba impaciente en sus aposentos 

–¿Encontraste al Sultán?–pregunto jugando con sus dedos viéndolo entrar–

–No Madre, no lo pude encontrar por ningún lado 

–Entonces, anda a buscarlo otra vez–exclamo viéndolo salir rápido y dio un largo suspiro–¿Dónde estarás hijo mío?–gimió de dolor, coloco su mano en su pecho– Q-Quiero agua...–la concubina que esta junto a ella le sirvió agua en un vaso, se lo paso y se lo tomo hasta que vio entrar a Nigar Kalfa, comenzó a toser–

–Sultana–dijo la concubina ayudándola a respirar– 

–Vete–dijo la Madre Sultana con su mano en su pecho, vio como su concubina se fue–

–Sultana, lamento quitarle su valioso tiempo pero hay algo que tengo que decirle...

La Sultana Madre se levanto y camino hacia ella para luego darle una cachetada botándola al suelo

–Madre...–llevo su mano a su mejilla roja–

La Sultana Hatice estaba en su palacio disfrutando la vista últimamente veía poco a Ibrahim y eso la colocaba insegura...Quería saber que era lo que escondía pero le aterraba la idea lo que pudiera descubrir...se sentía sola e incluso ansiaba estar embarazada pronto para que su bebe le hiciera compañía... 

–Ibrahim–lo ve entrar apresurado–

–¿Que?–la mira de mala forma–

–Ahm...hace días que no te veo y quería saber si querías desayunar conmigo...–dijo un poco insegura– 

–No, no quiero–la mira– Tengo trabajo que hacer...

–¿Qué trabajo haces Ibrahim?–pregunto– Lo único que quiero es que estés a mi lado...

–El bien del imperio, ese es mi trabajo 

–¿Y el del un esposo?–Pregunto Hatice con sus ojos llorosos– Crees que no me doy cuenta, te estas alejando de mi y aunque no lo creas me importas...quiero que estés a mi lado

–Lose Sultana pero tiene que entenderme...

–¿Entenderte? Eres un inútil Ibrahim, me haces daño...–las lagrimas corren por su mejilla–Estoy todo el maldito día sola en este inmenso palacio y me volvería loca...quiero un bebe pero tu no me tocas porque se que me tienes asco

–Mi Sultana...

–¡Cállate!–exclamo– Me estas destruyendo y lo peor es que estoy dejando que lo hagas–se limpia las lagrimas– 

Ibrahim la mira, se trata de acercar a ella pero lo apunta con una espada que saco de su vestido–Mi Sultana baje eso por favor...

En los aposentos de Reyhan y Mehmed, los dos estaban abajo de las cubijas riendo y acomodándose

–Mehmed, se mas cuidadoso–dijo Reyhan en un jadeo– 

–Es que no puedo meterlo bien–dijo Mehmed riendo y la penetro sin piedad–

Reyhan grito excitada, movió sus caderas al mismo tiempo que el príncipe la penetraba y sintieron como abrieron la puerta 

–Buenos días mis niños–dijo la Sultana Hurrem emocionada emocionada– 

–¡Quítate!–exclamo Reyhan riendo mientras salía debajo de las cubijas– Sultana...–se sonroja– Perdón por no estar presentable para la ocasión...

–Pero Madre...–dijo el príncipe haciendo un puchero–No podías venir después–coloca sus manos en la cintura de Reyhan– 

–Y tu hijo mío, no podrías dejar de tener sexo con Reyhan acaso–dijo divertida– No te preocupes querida, venia a dejarles el desayuno y dejarte una hierba para la fertilidad...

El príncipe Mehmed miro a su amada, ella se sonrojo por lo que había dicho su madre–En todo caso Sultana, yo creo que es solo cuestión de tiempo que la deje embarazada 

–Sultana, será en el momento indicado...

Reyhan creía que los herederos del imperio llegaban en el momento indicado que tonta era porque al fin y al cabo llegan cuando las cosas están mal...es el principio de una lucha que la dejara al borde de la locura...

Feriha Sultán (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora