Deseo de libertad

Capítulo 3 "¿JUNTOS PARA SIEMPRE?"

Después de eso fuimos a casa para yo alistarme para mi otro trabajo y luego el me llevó, me despedí con un abrazo y le dije que nos veríamos más tarde. Las horas pasaron rápido así que tome mi teléfono para llamar a Yeontan.

Sara: ¿aló?

Yeontan: ¿sí?

Sara: voy a salir.

Yeontan: ¿quieres que te busque?

Sara: no hace falta, ya me trajiste.

Yeontan: me llamas si pasa algo.

Sara: bien, luego hablamos.

Cuando llegué a casa Yeontan me espero con los brazos abiertos, corrí a abrazarlo con alegría y entramos a la casa.

Sara: ¿Qué cocinaremos?

Yeontan: ¿Qué tal pasta?

Sara: si, rico.

Sara: pon el agua a hervir mientras yo me cambio, por favor.

Yeontan: vale.

Subí a mi habitación a ponerme pijama y como hacia calor opté por un pantalón corto y una blusita sin mangas.

Después de varios minutos en la habitación baje a ver como estaba todo en la cocina. Me pare al lado de Yeontan y me miró de arriba abajo y sonrió.

Sara: ¿Por qué sonríes?

Yeontan: por nada, estas preciosa -dijo gracioso-

Ayudé a hacer la salsa picando unas cosas y sentí que me abrazo por la cintura y recostó su cabeza sobre mi hombro.

Sara: ¿Qué quieres amor?

Yeontan: ¿Qué dijiste?

Sara: ¿Amor?

Yeontan: me acabas de decir … ¿amor?

Sara: no, ¿Qué crees? Solo fue tu imaginación.

Yeontan me colocó frente a él y me beso.

Sara: ¿Qué fue eso? -le dije con voz nerviosa-

Yeontan: te amo Sara.

Sara: ¿enserio?, mejor a vamos a terminar de cocinar.

Yeontan: ¡oye!, Te amo!

Me gusto eso que dijo Yeontan así que decidí sorprenderlo. Fui a donde él darle un abrazo, sentí los latidos de su corazón, luego lo miré fijamente para después acercarme a darle otro beso.

Sara: ¡yo también te amo!

Yeontan: vamos a jugar -me dice con una cara pícara-

Sara: no, mejor ayúdame a poner la mesa.

Yeontan: ándale vamos.

Sara: no y no, no quiero hijos ahora.

Yeontan: bueno, terminemos rápido.

Así pasaron varias semanas de nuestra relación llena de amor, besos, caricias y risas, Yeontan se acercaba a mi e iba directo a mis labios.

Hoy es 21 de julio, en dos días es el cumpleaños de Yeontan y planeo salir con él a dos lugares, espero que todo se pueda dar como quiero. Mañana voy a comprar algunas cosas para le decoración, pero no sé a qué hora lo haré, tengo que ayudar a un amigo con una clase, talvez podría ir después de terminar.

Son las 3:10, ya tengo que irme.

Sara: cariño voy a la biblioteca a ayudar a un amigo con su clase.

Yeontan: ¿Qué amigo?