¿una carta termino con un nuevo papá ? o ¿dos? (pausado)

Capítulo 13 : Niños, secuestros y devoluciones

Hizashi agitó lentamente su vaso de whisky mientras miraba alrededor de la trastienda. Sus hombres se sentían bien consigo mismos, a muchos les dijeron que no podían hacer ningún tipo de trabajo de héroe con sus Quirks y de repente salieron a salvar a la gente. De acuerdo, todavía estaban robando a la gente, eliminando algunos objetivos aquí y allá. Pero la mayoría de sus hombres estaban bastante contentos de ayudar a aquellos que estaban siendo violados por un individuo enfermo.

    

     Algunos necesitaban ser corregidos cuando se pusieron manos a la obra , pero en general lo estaban haciendo mejor que los supuestos héroes. Izuku había estado tranquilo los últimos días, desde ese día en la playa. Sin embargo, Hizashi no se preocupó por eso, el niño generalmente estaba estudiando diferentes Quirks, parado al borde de las peleas de héroes y reuniendo toda la información que podía.

     Fue temprano en la tarde cuando recibió un mensaje poco divertido de su héroe profesional  favorito .

Shouta: '¿Adónde diablos llevaste al niño esta vez? Le dije a su madre que lo llevaría a casa a las 8 de la noche.'

Kiiroi: '¿De qué diablos estás hablando? ¿Tomaré a Izu mañana?'

Shouta: 'Será mejor que estés bromeando conmigo, acabo de ver que lo subiste a tu auto'.

Kiiroi: ' Shou, ninguno de mis hombres ha ido tras Izuku hoy.

Iba a hacer que Dabi lo recogiera mañana.

     Hizashi sintió pánico solo por un momento antes de que una curiosa clase de calma lo invadiera. Su mente repasó a todos sus enemigos para descubrir quién lo estaba atacando y cómo podrían haber descubierto lo de Izuku. Todos se quedaron en silencio, habiéndose congelado cuando Hizashi se disparó y comenzó a clavar sus dedos en su teléfono furiosamente, llamando a Dabi. Cuando su pequeño cerebro de llamas finalmente se recuperó, pudo escuchar su maldición.

     “Mierda, lo siento Hizashi, no sé cómo sucedió y aceptaré cualquier castigo que quieras darme, pero fue esa maldita perra de Yakuza. Simplemente agarré al niño frente a mí antes de que llegara a donde estaba Eraser. Kid ni siquiera comenzó a enloquecer hasta que vio quién era”. Llegó el furioso gruñido por teléfono y Hizashi se congeló, y todos sus hombres instantáneamente se encogieron en sus asientos cuando el aura opresiva de Hizashi estalló. Sus ojos estaban muy abiertos y sin ver cuando le ordenó a Dabi que continuara siguiendo al auto.

     Los ojos de Hizashi se nublaron cuando se dio cuenta de que Yakuza Oyabun comenzó a llamarlo. Honestamente se había olvidado de esa situación que tenían, y ahora todos se iban a arrepentir. Contestó el teléfono y no se molestó en darle al hombre la oportunidad de hablar, y con calma le dijo al hombre que le diera una posible ubicación y toda la información sobre el hombre que había secuestrado a su hijo o su organización pagaría con sangre. La voz de Oyabun tembló cuando dijo que no podía darle a Hizashi más información de la que ya sabía y Hizashi tarareó en el teléfono, simplemente colgó.

Se puso de pie e hizo un gesto a sus hombres, unos pocos se pusieron de pie y se dispersaron como gatos asustados para comenzar a rastrear su pequeño frijol verde. Apretó su teléfono con fuerza, y eran casi las cuatro de la tarde, innumerables mensajes de texto de Shouta tratando de disuadirlo de hacer algo drástico para salvar a Izuku, pero Hizashi los ignoró. Dabi finalmente se puso en contacto con él sobre una ubicación y Hizashi inmediatamente salió furioso. El idiota y su pequeña banda de desertores se habían refugiado en las afueras de la ciudad, a una buena hora de distancia. Le envió un mensaje a Shouta cuando estaba a diez minutos de Dabi, diciéndole que no se preocupara y que el niño regresaría antes de que Shouta tuviera que llevarlo a casa, completo y saludable. Luego apagó su teléfono e indicó a sus hombres que rodearan el lugar mientras se acercaba a la pequeña choza con Dabi.