10

24 4 0
                                    

El omega menor yacía en la cama individual con un paño en la frente, sus párpados estaban apretados y su labio inferior temblaba. Con suavidad frotaba su vientre donde su hyung le puso un aceite esencial para que disminuyera el dolor.

—Volvió hace unos minutos—habló con Hoseok por celular.—Te llamaré cualquier cosa Hobi, perdón por correrte de tu casa así...Si, gracias—colgó después de un momento.

La razón de haberlo sacado de casa fue porque conocía la condición de su raza. Cualquier omega en celo en contacto directo con un alfa con el cual no comparte un lazo, probablemente reaccione o bien... o muy mal. Suga regularmente era muy empalagoso con su hermanito alfa, su lazo de hermanos era muy estrecho y fuerte, pero el omega últimamente no estaba en la mejor disposición.

—Yoongi-yah...

—Cállate—habló en seguida sintiendo una punzada en su sien. Quitó el paño de su cabeza de un tirón y abrió los ojos con pesadez—Maldita sea, ¿Qué haces aquí?

Seokjin frunció su ceño desde la esquina del cuarto, no había querido acercarse a él porque estuvo algo violento cuando intentó tratarlo.—Idiota malagradecido, vine a ayudarte.—bufó, caminando hacia él.

—Pues esta mierda sigue dol...doliendo—abrazó su vientre—Mucho...

—Vamos a cambiarte—intentó bajar sus shorts pero el menor lo detenía, avergonzado—Omega, estás empapado.

Yoongi chasqueó sus labios, si bien estaba apenado de su situación, no era algo nuevo para el mayor.

—Aléjate.

—Yoongi-yah, déjame ayudarte. Verás que estás más cómodo, vamos—bajó sus shorts de un jalón y lo aventó al cesto de ropa sucia.—Voy a quitarte eso, ¿está bien?

El peliblanco negaba con su brazo izquierdo cubriendo su cara sonrojada.—No.

—No miraré nada, Yoon. Lo prometo—habló con cuidado. Trató de quitar su brazo para mirarlo a los ojos. Cuando se dejó hacer, Seokjin quitó el flequillo empapado de sudor y del propio paño descongelado de su frente. Dejó un besito ahí.

Silencio reinó la habitación. Esperando un reclamo que jamás llegó.

—Tú...—susurró.—Tú

Jin hizo una mueca de confusión.—¿Yo?

Yoongi lo tomó de la nuca y lo acercó demasiado, tanto que Seokjin se tensó. El omega menor lo miró a los ojos y acercó su rostro al cuello contrario.

Sintió cosquillas cuando Min pasó su nariz fría sobre su caliente cuello, lo sintió respirar, olfatear.—Yoongi-

Este arrancó sin cuidado el pañuelo lila del mayor y lo arrugó en su mano.—Tú...maldito traidor.

Seokjin abrió sus ojos y se alejó. ¿Traidor?

—¿De qué hablas?...Suga tranquilo, dime que pasa, lindo—tembló cuando notó el omega salir, con esos ojos azules cielo, sus garritas en el cuello de su camisa.

—Esto...esto no es tuyo—alzó la prenda en su mano.—Es mío.

No podría estar más confundido, ¿a qué se refería?

—¿Ah? ¿Te gusta, es eso? Puedes quedártelo, no me molesta.—no podía alejarse, Yoongi lo tenía agarrado con sus uñas y temió que rompiera su camisa.

—Esto no huele a hyung, huele a alfa. No huele a lavanda, huele a mandarinas. A mi me gustan las mandarinas, no a hyung—gruñó molesto.

Ahí lo entendió todo. Su mente haciendo el recuerdo del pequeño alfa tendiéndole su pañuelo, doblándolo perfectamente.

Seoulmates Ink | 𝑁𝑎𝑚𝐽𝑖𝑛 / 𝑇𝑎𝑒𝐾𝑜𝑜𝑘 / 𝐽𝑖𝑚𝑆𝑢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora