A estas alturas no te niego que siempre deseo estar contigo, siempre deseo ahogarme en tus caricias, en tus arrebatadores besos, en tus pechos evocadores de apetito y tus cabellos, los cuales mientras voy cortando se van convirtiendo en un simple mito.
Y cada vez estoy más cerca de ti, miro tus ojos y logro apreciar lo perfecto que ha sido este amor, miro tus caderas e imagino un mar inmenso, yo navegante intrépido adentrándose hacía costas de pasión.
Ruego por un minuto más en tus pechos, ruego por escuchar un latido más, ruego por sensaciones de colores diferentes, luces de ciudad intermitentes que persiguen en lo más profundo de mi perversión y me arrastran.
A tu disposición me siento, en tus piernas me recuesto, platicando sueños de cama contigo, porque así es el amor, así es la confianza, así es la pasión, así late mi corazón.
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Cartas de inercia; sobre un amor obstinado
PoesíaCartas, poemas, recitales, textos, no sé que son pero aún así se le dice poemario. Una recopilación de textos y cartas extremadamente cortas escritas por mí, con mucho sentido Estos escritos representan en su mayoría mi visión del amor a lo largo de...