Supe de su existencia el día en que mis propias manos lo trajeron a mi vida, en aquel momento en que se me cruzó por la mente como un destello de luz y simplemente sentí la necesidad de pasmarlo en una hoja para nunca más olvidarlo.
No había manera de olvidar algo tan inexplicablemente bello.
El problema es que aquella piel tan blanca nunca fue un destello de luz, más bien aquellos ojos negros fueron el destello de oscuridad que me atrajo a un mundo de pesadillas, de desconcierto y perdición.
Y aunque desde niña siempre fui muy curiosa, también, siempre me mantuve al marguen.
Pero un día simplemente lo vi y no hubo reglas que me detuvieran.
Un día simplemente lo vi y algo más que una inocente curiosidad estalló dentro de mí.
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Mejor sin ti
RomanceEnamorarme de él fue como caer en desgracia. Todo envuelto en uno, él era tantos pecados juntos. Habría hecho cualquier cosa, todo por él. Y si me preguntas, lo volvería a hacer.