rechazo ajeno y aceptacion propia

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He de amarte yo y entender el adios,
me ha de perjudicar el dolor,
veo en tu carne belleza ,
veo en tu mente determinación,
al igual mi fugaz aprecio y amor,
una emoción yace muerta,
Tu carne y tu mente es la belleza
Talvez oculta con espinas sangrientas,
talvez ahogadas en las cuencas,
o acaso no fui agradable,
porque no te apetece que te ame,
porque no es válido que te extrañe,
a mis ojos eres perfecta y única,
eres hermosa desde el alma,
eres diferente y especial ,
pienso que eres sobrenatural,
ingrato e indigno me siento ante ti,
adorarte es lo que deseo,
admirarte y amarte yo puedo ,
ruego por la oportunidad ,
noto que para ti no importo,
veo con facilidad que no aporto,
que aquello que deseas no ves,
almenos en mi no te intriga ,
solitario y herido me veo ,
que más puedo expresar ,
la fugaz y elegante verdad,
sigo sin entender más ya conozco,
aceptar aquello es aún difícil,
talvez notaste ese vacío ,
no te agrada eso llenar ,
más agradecido he de estar ,
mi camino en la soledad puede brillar,
algo hermoso en mi encontraré,
las espinas propias conoceré ,
mucho yo solo lidiare y me asusta,
me alegra saber más y aprender,
Espero aprecio propio y solo eso,
aprender a amarme nada más

Poemarío : Alboradas nocturnas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora