El menor hizo un sonidito para que supiera que me estaba escuchando, en ningún momento aparto su mirada de la televisión, al ver que no hablaba el menor me miro confuso, me encontraba quieto, viendo un punto del salón fijo mientras las palabras de Ni-Ki seguían pasando por mi cabeza.
–¿Estas bien?
El peli rojo se acerco un poco a mi y puso su mano en mi hombro, en ese momento reaccioné y lo mire a los ojos, sus hermosos ojos azules, aunque fueran falsos, eran preciosos. Jungwon comenzó a mover un poco mi hombro al ver que no le contestaba haciendo que se preocupase, cuando note que el menor se acercaba más a mi actúe, lo empuje leve por los hombros, me senté encima de su regazo y me acerque peligrosamente a su rostro, cuando tuvimos nuestros labios rozandose pense que en cualquier momento el menor me quitaría de encima suyo o se apartaría, pero en ningún momento hizo eso, lo contrario, cuando junte por fin nuestros labios el peli rojo puso sus manos en mi cintura y me apegó más a el, saboree todos sus labios, eran tan dulces y jugosos, luego de unos segundos me separe de el por falta de aire y nos quedamos viendo a los ojos, Jungwon sonrió de lado y unió nuestros labios de nuevo comenzando una guerra entre nuestras lenguas que termino por ganar el, yo solo me deje llevar, en esos momentos me sentía en el cielo, no quería alejarme de esos labios pero tuvimos que hacerlo de nuevo para respirar, nos quedamos viendo de nuevo a los ojos, ambos con unas sonrisas bobas pero el menor rápido dejo de sonreír, su mirada paso de cariño a preocupación, me aparto con cuidado de encima suyo y se levantó para ir corriendo hacía su habitación, confundido me quede en el sofá esperando a que volviera, el menor salió de su habitación con una chaqueta y un gorro puesto, me miro por última vez antes de agarrar las llaves he irse no sin antes cerrar con seguro, hice un puchero y me cruce de brazos, ¿Hice algo mal? Me pregunté a mi mismo.
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–Jay, ¡Jay! -lo agarre de los hombros y lo voltee.
–¿Que haces aquí? ¿¡Has dejado a Sunoo solo!? -le tape la boca antes de que siguiera hablando.
–Escúchame, cerré con llave, esta bien -el mayor asintió y quite mi mano- Sunoo me beso, y luego...Lo bese yo -Jay abrió sus ojos como si fueran dos platos- No se que hice, joder
–Espera, ¿Que hay de malo?
–¿Lo preguntas enserio? -el mayor asintió- ¡Jay no debería encariñarme de nadie y menos de un humano! -baje el tono de voz al notar que había más gente en los pasillos- No puedo hacerlo
–¿No puedes o es por todo lo que tus padres te han estado metiendo en la cabeza desde pequeño? -me quede en silencio y mire al suelo- Jungwon, desde pequeño tus padres te prohibían hasta hablar conmigo, siempre te decían que no podías enamorarte y eso
