¿Cómo superar a Willow Park? Boschlow

Capítulo 37-. Quiero morirme.

Su alma se murio y ahora solo queda la herida...

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Boscha estaba segura qué queria explicarle a Willow lo que pasaba pero,su maldita voz no salía.

Las bolsas que Willow cargaba ya hacían en el suelo,la azabache agacho la cabeza y nego.

La omega se encontraba bajo un escudo para la lluvia,extendio una mano hacía Willow,le dolía ver las gotas hirvientes caer sobre la alfa.

Apenas intento acercarse y Willow se aparto,comenzo a correr en otra dirección, cómo si de un deja vu se tratara, Boscha la veia alejarse una vez más.

El escudo sobre su cabeza desapareció, no le dolía la lluvia hirviente, le dolía más esa mirada de nuevo en Willow la misma de cuando tenían 14 y había gritado cosas hirientes.

Sacudió la cabeza para intentar alcanzarla, pero ya la había perdido de vista....

Las llaves de Willow cayeron en el suelo, sus manos aun estaban temblorosas, sentía un mareo terrible y un nudo en la garganta.

Fue directo a el sofá de la sala dónde se dejo caer, llevo sus manos hacía su rostro para intentar contener las ganas de llorar, seguramente había una buena explicación Boscha no la engañaría, la amaba.

Sus manos fueron cayendo lentamente, su vista se desvío hacía el pergamino qué descansaba sobre la mesita, seguramente Boscha lo había olvidado por la mañana.

Lo sostuvo entre sus manos dudosa sobre si debía violar así la privacidad de su prometida ¿Aun lo era?

Lo encendió, el fondo de la fotografía de ambas en uno de sus viajes ahora era remplazado por uno de Boscha sóla.

Trago saliva, buscando los mensajes y respiro profundo antes de ver en ellos, su corazón le gritaba que era un error qué ella jamás la traicionaria, nunca.

Sus labios se fueron separando, sus manos temblaron aun más en cuanto encontro el chat con el nombre "Hunter" ¿Ese era su nombre?.

Su corazón lentamente se quebraba, los te quiero, los me la pase genial y de inmediato a su mente vinieron tantos recuerdos de llegar a casa y no encontrarla, de qué se fuera sin avisar.

Hasta que el último mensaje era un "Quiero verte te necesito" ¿La necesitaba? Ella también la había necesitado.

Dejo el pergamino en el sillón y subió las escaleras, necesitaba agarrarse de la protección de madera ya que sus piernas temblanan.

— No jaja es sólo un error ésto no es real — Las risas escaparon de los labios de la azabache mientras caminaba hacía la habitación qué ambas compartían.

Pero se detuvo frente a la recien arreglada puerta de el lugar donde el nido de Boscha albergaba espació, abrió la puerta lentamente.

Sonrió al ver todo cómo debía ser, su amontonada ropa sobre la cama, la cama donde ella tomaba a su omega donde le había dicho lo mucho que la amaba.

Se daría la vuelta para esperarla, seguro existía una explicación una real, algo qué le dijera qué no era lo que pensaba.

¿Y si ese la había obligado? ¿Y si sólo estaba confundida? Tenía qué haber algo, vio una prenda una playera de Boscha tirada en el suelo y la levanto para regresarla a su lugar odiaba el desorden.

La acerco hacia su rostro para poder ofatear el dulce aroma de su omega pero sus pupilas se dilataron al distinguir un aroma diferente, el de otro alfa.