—Que te parece venir a conocer mi trabajo? —me mira sonriendo.
—No pensé que fuera tan grande tu lugar de trabajo —miraba todo sin perder detalle alguno.
Mirar a veces te da la respuesta a lo que cuestionas, y aqui se siente como si en cualquier momento te fueras a llenar de preguntas; es en un principio intimidante, por qué es un lugar donde las expectativas son altas y el ego y fuerza también.
Continuamos caminando y se veía como todos hacían lo que les correspondía y ninguno se quejaba, o por lo menos no se notaba. Primero pasamos por un campo de tiro y todos al mismo tiempo tiraba apuntando hacia un punto blanco que desde aquí se veía muy pequeño, después unos dormitorios, y más adelante se empezaban a ver aviones, uno de ellos era revisado por dos personas mientras que los demás estaban en lo suyo.
Pero llamaron mi atención un grupo pequeño de chicos que jugaban como estuvieran en un campo de fútbol, se correteaban entre si, rían y empujaban amistosamente. Eso hizo que mi timidez saliera y me hacia que deseara pasar lo mejor lejos posible de ellos.
—Ay no. —decia mientras que volteaba la mirada hacia mi para no ver en la direccion en la que supongo que estaban lo chicos.
— Que pasa?.
—Espera aqui Elizabeth —con su mano izquierda le hizo señas a otro chico que estaba un poco lejos de donde estabamos mi papa y yo, asi que se acerco un poco a el y solo alcance a escuchar que pusiera a hacer algo a los que estaban jugando.
Despues el chico asintio con la cabeza y les grito a los otros
—Ponganse a lavar el F-14 par de distraidos —Se iban dejando de juagr y despues ir a donde estaba el avion; pero me parecio ver que uno de ellos se quedo parado solo en su mismo lugar y veia en direccion mia.
—Bien Elizabeth ya vamonos, por que si te preguntas no falta mucho para llegar a donde si debo —empezo a caminar y por quedarme distraida viendo a el chico para confirmar si me estaba viendo o no, tuve que voltear la mirada y ver que mi papa ya iba algo adelantado me hizo casi correr—. Voy.
—Oiga, señor Darlon. —se iba acercando a nostros un muchacho alto y su oberol de piloto desarreglado que mostraba su camisa interior blanca.
—¡Hola!
—Ah, hola? —le respondi algo extrañada ya que no lo conocia.
—Que hace algo tan pequeño en un campo tan inmenso?. —me miraba divertido tratando de que le diera pie a un conversacion.
Me detuve un poco y le di una oporunidad a que hablaramos, sonrei ampliamente para asi poderle contestar —Lo siento, este no es mi lugar de trabajo. —el solo me miro curioso por saber mas.
Y veme aqui estando parada con un guapo extraño que me seguia sonriendo, en cuanto a mi seguia desconcertada por su accion; pero que mas podia hacer.
Mi nerviosismo me delataba por que emezaba a morderme los labios y el era lo contrario, derrochando seguridad y un aura de felicidad que en cierta forma te podia llegar a intimidar pero su dulce sonrisa hacia que eso se viera frustrado y solo pudieras verle con amabilidad en vez de miedo. Supongo que ser militar hace que tengas cierta vibra de malo o estricto, ya que los entrenan para todo tipo de situacion desgarradora o improvista.
Su cabello aun seguia bien peinado, y solo de vez en cuando un mechon aparecia en su cara por el viento fresco y bajo, con su oberol verde y su camisa blanca un poco opaca de el sudor o el tabajo supongo; lo hacian ver espectacularmente bello, sumandole que empezaba a atardecer detras de el y la luz le reflejaba bien.
—Hoseok!, que haces tan alegre platicando con Elizabeth?. —volvio mi papa con nosotros y puso su mano sobre el hombro de hoseok, mientras que este lo miro y le mostrouna sonrisa.
—Platica, solo platica.
—Oh!, pero me parecio que Yoongi les habia dicho que lavaran el F-14. —le apretaba el hombro y hoseok empezaba a reir nervioso.
—Ahh...si, pero al parecer ya descubri quien fue el que lo mando a decirlo.
—Si, aja' eres un genio. Ahora ve y ayuda. —dice ahora mas serio.
—Te parece si cuando estes libre vienes y nos conocemos mejor?. Y de paso visitas a tu papa para que te deje venir —guiña un ojo y me ofrece su mano para estrecharla con su sonrisa mas bella y esplendida.
—Si!. —rapidamente le conteste sonriendo y le di mi mano a lo que el tomo con sumo cuidado.
—Bien, ya vete. —asiente y se detiene a buscar algo entre su ropa, unos lentes de sol, que no me habia dado cuenta que los guardaba; se los puso y nos dedico una pequeña reverencia ya mas serio a mi papa y a mi.
Oh!, please take my breath away.
