Reina de Reyes

CAPÍTULO 10

Modales, danza, música, poesía, historia...son algunas de las clases que estamos obligadas a tomar en este estúpido lugar, han pasado casi dos meses desde que el Rey se fue a la campaña y las cosas por aquí se han vuelto un poco sombrías.

La Reina es quien lleva el mando de las cosas en la ausencia del niño con corona y casi no la he visto en el jardín como solía hacerlo. No hemos tenido noticias del Rey desde que partió camino a la campaña, así que imagino la angustia que debe sentir al no saber de su hijo.

Nana suele hacerme galletas cuando voy a visitarla, se encuentra bien y está muy alegre, hizo amistades con las señoras del lugar y suele salir a caminar con los niños del pueblo. Es como si ya se hubiese acostumbrado a su nueva vida y eso me alegra.

Aunque extraño mi hogar, no he pensado tanto en el desde que estoy aquí, solamente sigo adelante por nana y para poder regresarle lo que le pertenece.

Siento que alguien tira de mi cabello y volteo a mirar a Issy de mala gana, ella me mira mal ya que no he prestado atención a su constante parloteo diario de como ambas Miss suelen felicitarla por ser la mejor del pabellón. Como dije antes, Issy lo presume cada que puede.

-¿Me estás escuchando?- Su voz se agudiza más de lo normal cuando está molesta.

-Claro que si- Mentí.

-Estás mintiendo, no me gusta que estés divagando en tus pensamientos cuando te estoy contando algo importante-. Camina rápido en dirección al jardín donde solía ir la Reina.

Issy sueña con conocerla y que la adoren de inmediato, pues dice que en un futuro será su suegra y ella será quien porte la corona.

-¿Y no te has puesto a pensar que tal vez estoy divagando en mis pensamientos por algo importante?- La seguí a paso rápido.

-De ser así entonces preocúpate cuando estés sola, no deberías preocupar a los demás con tus problemas-.

Altas ganas de soltarle un buen golpe justo ahora.

-Te comportas como una auténtica p...-No pude terminar lo que iba a decir ya que Issy soltó un grito de emoción.

-¡Oh por Dios, es la Reina!-Brincaba y aplaudía como si hubiese obtenido un juguete nuevo.- Debo ir a presentarme.-Comenzó a caminar en dirección a la madre de Eve con tanta confianza que incluso pareciera que fuese su amiga de años.

La Reina lucía bastante decaída, su semblante no es el mismo de aquella mujer que conocí en este mismo lugar y que destellaba poder, ni siquiera parecía ella misma. El no saber de su hijo la debe tener muy angustiada, podría decir que incluso bajó de peso y puedo ver unas bolsas negras debajo de sus ojos. Lucía como una mujer sin alma.

Quería saber cómo se encontraba así que fui detrás de mi compañera, también para frenar a Issy por cualquier cosa.

-¡Alteza!- El grito de Issy llamó la atención de la Reina, la cual parecía estar hundida en sus pensamientos. -¡Reina Erea!- Confirmado, esta chica no tiene prudencia alguna.

La Reina giró su cabeza en sentido contrario a nosotras y pareció limpiarse un rastro de lágrimas, cuando nos acercamos del todo pude notar sus ojos rojos e hinchados, había estado llorando.

-Issy no creo que este sea un buen momento para molestar a la Reina, ya tendrás más oportunidades de conocerla, deberíamos irnos.- La tomé del brazo tratando de detenerla, ella me miró con enojo y tiró de su brazo con gran fuerza logrando soltarse.

-Yo decido cuando es un buen momento y digo que este lo es, no te entrometas.- Se acercó a la Reina con confianza y se sentó a su lado. -Un gusto conocerla, mi nombre es Issy Smith.- Mostró una sonrisa de oreja a oreja.

-¿Eres la hija de Erick Smith?- La Reina la escaneó con su mirada.

-Así es, soy la princesa de Sabanok, formo parte de la casa de las doncellas y soy la mejor de la clase.- Espetó orgullosa de sí misma.

-Entiendo...-Su mirada parecía desinteresada, entonces sus ojos se posaron en mí y me dio una pequeña sonrisa.- Señorita, un gusto volver a verla-.

Hice una reverencia y plasmé mi mejor sonrisa, sé que la Reina está pasando por un mal momento pero es mi momento de molestar a Issy.

-El gusto es mío Alteza-. Issy tenía una mirada incrédula en su rostro y se notaba que estaba conteniendo su molestia. -Hace mucho que no la veía en el jardín.- Seguí con mi aire de inocencia y amabilidad.

-He tenido muchas cosas que hacer, pero siempre es bueno liberar los problemas al aire-.Sonaba cansada.

-Estoy de acuerdo con usted, si tiene alguna preocupación puede contar conmigo, siempre me ha gustado escuchar los problemas de los demás para poder ayudarlos.- Issy intervino rápidamente, jamás pensé que podría ser tan falsa, hace unos momentos me dijo que no le importaban los problemas de los demás.

Hipócrita e interesada.

La Reina la miraba con una vista gélida, Issy estaba tratando de agradarle pero creo que estaba logrando todo lo contrario.

-Issy, creo que es mejor que nos vayamos, su Alteza debe querer descansar.- Sin embargo, ella se apresuró en tomar la mano de la Reina y la sostuvo con sus dos manos.

-Quiero que sepa que siempre he estado interesada en su hijo, y seré la siguiente en convertirse en la futura Reina, espero me acepte como parte de su familia.- Habló tan rápido que su Alteza abrió sus ojos de más debido a la sorpresa, esta apartó su mano de Issy y se colocó de pie con indignación.

-¡¿Qué tipo de descortesía es esta?!- La Reina estaba furiosa.

Issy se colocó de pie de inmediato y yo también.

-¿Cómo te atreves a proclamarte futura Reina? ¿Cómo te atreves?- Los sirvientes se percataron de los gritos de la Reina. Es primera vez que la veía así.

La tristeza en sus ojos fue reemplazada por una furia viviente.

-No quise ofenderla, solo quería hacerle saber lo que sucederá-. Creo que no sabe cerrar la boca.

-¿Es que acaso no respetas mi presencia?- La Reina Erea se acercó con pasos de furia hacia Issy, pero esta la miró como si se tratase de una esclava.

-Claro que la respeto, pero soy la mejor elección para ese puesto y nadie evitará que lo obtenga-.

-¡Lárgate!- Gritó la Reina, Issy dio paso atrás e hizo una pequeña reverencia.

Iba a seguirla pero su Alteza me detuvo.

-Usted no señorita-. Posee mi vista en Issy la cual me miró furiosa y se fue a paso rápido, miré a la Reina la cual me observaba con una pequeña sonrisa.

-¿Me podrías acompañar a tomar un poco de té?

Le di mi sonrisa más sincera

-Sería un honor, Alteza.

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Les presento a la Reina Erea en la multimedia de arriba.

Espero que les guste <3