Día 24: Misionero inverso

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"¿Qué es esto?" Keqing suspiró, meneando desganadamente las caderas mientras empujaba a Ganyu hacia las sábanas una vez más. Lo horrible de la posición al menos la había animado a mezclar un poco más sus movimientos, para intentar que surgiera alguna chispa entre ellos. No ayudó mucho, con el ángulo incómodo con el que tuvo que ingresar a Ganyu solo empeorando todo. "¿Por qué se le ocurrió a alguien esta posición? Es horrible."

"¿Tal vez les gustan mucho los pies? Eso es todo lo que puedo ver o jugar desde aquí." Ganyu gimió con decepción mientras se sentaba. Esta era otra posición más que abandonaba por completo todo lo que disfrutaba del sexo con Keqing, más allá de la sensación física más básica, pero incluso eso la decepcionaba. Puso una mano en las caderas de Keqing, empujándola para mantener a Keqing inmóvil, profundamente dentro de ella. "¿O tal vez se supone que funciona así?"

Ganyu utilizó su agarre en la cintura de Keqing para controlar el ritmo, pero no mejoró mucho las cosas. No había mucho que pudiera hacer con los rasgos más maravillosos de Keqing fuera de su alcance. Nada podía sustituir el poder ver las expresiones adorables de la Yuheng mientras hacía el amor con ella, y con el rostro de Keqing tan lejos de ella, esto solo dejaba ese hecho dolorosamente claro. Era tan insoportable e insatisfactorio hacerlo así, especialmente cuando estaba tan tentadoramente cerca de ser su posición favorita. Ella cedió, levantando las caderas para sacar a Keqing de ella.

"Muévete, por favor." dijo Ganyu. "Quiero mirarte."

"¿Nos rendimos de nuevo? Este es realmente bastante malo, y además es incómodo."

"No." dijo Ganyu, casi arrastrando a Keqing para encontrarse con ella cara a cara. "Solo hagamos lo de siempre esta noche."

"Pero... ¿el calendario? ¿No querías seguirlo?" dijo Keqing. Por mucho que inicialmente pensara que la idea de seguir un calendario era simplemente una excusa tonta para tener mucho sexo, el patrón de tener que probar algo nuevo una vez al día realmente se había apoderado de ella durante las últimas semanas. Rechazarlo le parecía una traición, a pesar de lo tentador que resultaba hacerlo.

"¡A la mierda el calendario!" Ganyu pronunció la maldición con una contundencia que desconcertó a Keqing. "Estoy demasiado jodidamente cachonda para no correrme esta noche, y hagamoslo como es debido, ¿entendido?"

Esa no era una demanda que Keqing pudiera atreverse a rechazar. La mirada feroz en el rostro de Ganyu solo confirmó que tampoco estaba exagerando con su pedido. Volvió a alinearse con la entrada empapada de Ganyu, empujando hacia adentro, sintiendo los confines apretados y calientes envolver su longitud mientras Ganyu la atraía hacia un beso desesperadamente necesitado y quejumbroso. Toda la decepción de Ganyu se desvanece rápidamente ante el rítmico martilleo de las caderas de Keqing, penetrando más profundo y más firme en ella con cada movimiento impulsado por el amor.

"Mucho mejor." balbuceó Keqing rápidamente entre respiraciones apresuradas y besos frenéticos. Con Ganyu tan maravillosamente debajo de ella, deslizó sus manos hacia abajo hasta que se encontraron con las de Ganyu y luego entrelazó sus dedos. Con un latido acelerado, captó la mirada dulce y ebria de placer en el rostro sonrojado de Ganyu, mirando los ojos lila brillantes y siempre significativos de su amante.

De vuelta en territorio familiar, y con el estado de ánimo aún intacto, Keqing estuvo tentada de pedirle a Ganyu otra ronda después de que terminaron la primera. Tal vez incluso podrían cambiar de postura, pensó, y dar otra oportunidad a una de las otras posiciones que habían funcionado bien antes.

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K: Basura

G: Falta lo que hace bueno al misionero

Mes de sexo Ganqing en Diferentes PosicionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora