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— Yibo... — Jackson lo persiguió. El castaño estaba furioso... Sostenía de la muñeca al doncel.

— Jefe! Por lo menos póngase el chaleco o deje que alguien más lo lleve... —

— Yibo!... Ash... — El guardaespalda que recién se había sentado a comer maldijo antes de correr al lado de su jefe. No debía salir del perímetro, pero Xiao Zhan había tocado todos los botones para hacerlo salir de control.

— Señor... Por favor!

— Mamá no ruegues... Si me va a matar que lo haga de una maldita vez.  Igual ya me jodieron la vida entera...

— Vete... No vuelvas... Si tu o tu mamá  cruzan esta linea, todos... TODOS... tiren a matar! — Yibo apunto con su revolver. Zhan se mordió su labio inferior. Yibo sabía que tenía que hacerlo... Era el último momento, despues... Sería muy tarde para el.

Sin embargo mientras amenazaba al pelinegro... otros hombres corrían hacia el interior. — Señor! Tenemos visita! — Yibo sonrió de manera perversa. Estaba esperando por esto.

— Jackson... Arriba. Vamos a darles la digna bienvenida.

De nuevo, Zhan quedaría de nuevo en fuego cruzado. Su madre estaba aterrada de nuevo. Se quedó totalmente inmovil mientras Yibo que le había dado la espalda se alejaba de él.

¿Qué clase de idiota era? ¿Por qué esperaba que Yibo lo protegiera si acababa de dar una orden de asesinarlo?

El no pudo quitar sus ojos de la espalda de Yibo y el castaño... — Es la gente de Darren. —Informaron por el celular. Involuntariamente el miró de reojo hacia atrás. Xiao Zhan no se había movido ni un centímetro.

— Xiao Zhan! Lo tenemos... No queremos problemas! — Anunció uno de los hombres. Lo conocía... Era He Peng.

Xiao Zhan prefería morirse... Así que miro a su mamá y asintió ... cruzó la línea hacia el interior de la mansión y llegó hasta la espalda de  Yibo...

El castaño lo pudo sentir cerca... Sabía que era el. Los demás esperaron su resolución...

Jackson encañono al pelinegro. — Jefe. Usted dirá.

Zhan no le dijo nada y solo apretó la mandibula esperando el impacto o lo que sea que fuera a suceder.

Yibo se giró hacia el doncel.

La voz de Darren se escuchó por un altavoz. — Wang Yibo... Solo vine por el. Entregalo y no daremos problemas. Ya dimos parte a la policía de donde están.

El castaño miró a Zhan... Era un asunto de orgullo... Dejarse amedrentar de Darren o no.

— Mierda... — Escupió furioso y después le sonrió a su primo, el cual estaba seguramente escondido en una de las camionetas. Debido a que Yibo no llevaba chaleco eran varios lo que le rodeaban. El intercambio podría ser fatal.

— Jefe. Entreguelo y vamos!

Yixuan negó. — Sí lo entrega o no, vendrán igual..

— Se pueden callar!

— Wang Yibo! Solo entrega a Xiao Zhan... La extracción puede ser limpia.

— ¿Extracción limpia? ¿De una rata como tu? — Se bufo.

Los ojos marrones... De Zhan... A pesar de que se mantenía firme, sus ojos suplicaba.

Finalmente soltó  una carcajada. — ¿Y si no quiero? ¿Qué?!

Tomó al doncel de la cintura. — cubranme! — Lo besó...

Yibo introdujo su lengua en la boca de Zhan.

Al tiempo, Darren perdió la cabeza por lo que estaba viendo y el intercambio empezó.

— HdP... Te cortare las malditas manos por tocar lo que me pertenece.

Yibo se carcajeo. — Te estoy esperando!

Xiao Zhan estaba aterrado, pero a diferencia de lo que pudo ser. Acurrucandose cerca de Yibo con su madre... Tenían más o menos veinte hombres protegiéndolo hasta sacarlo del peligro.

Al ver a Yixuan... El que le había traicionado..Darren bajó de la camioneta y lo señaló. — Quiero su cabeza en mi cumpleaños.

💚❤️

Como siempre... Los lavaperros son los que se matan, mientras los de la plata se sientan a tomar tinto🙄..

Hijo de la MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora