Hay un chico en una fiesta .
El chico no sabe si de verdad se encuentra ahí.
Hay muchos ojos a su alrededor,
pero ningunos se jijan en él.
El chico trata de hablar,
pero no puede escucharse a sí mismo.
El chico es engullido por la soledad.
La soledad es profunda y espesa.
Intenta todo lo posible para escapar,
pero cada vez se unde más en ella.
Hay una chica en la fiesta.
La chica es luz y es alivio.
Tiende una mano hacia el chico.
El chico la agarra con fuerza y asciende.
Los ojos de ella se fijan en los de él.
El chico habla y es ella quien lo escucha.
El chico se encuentra por fin en la fiesta.