Capitulo 19

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Capitulo 19

Presentaciones 

La sensación de seguridad y amor propio me recorrió desde la cabeza a la punta de mis pies.

No era muy común que yo me llegara a sentir conforme con mi cuerpo y mi aspecto, pero en este momento me sentía la persona más bonita del mundo.

Veía mi figura reflejada en aquel espejo de mi habitación, Mariana se encontraba detrás de mí viéndome con unos ojos que transmitían amor y orgullo puro.

Un hermoso vestido corinto adornaba mi cuerpo, sujetado de la parte de arriba y suelto de la cintura hacia abajo con una lijera abertura, con un escote en forma de corazón y las mangas caídas.

Mientras que el hermoso collar regalo de James adornaba mi cuello, un labial rojo carmesí en mis labios y un toque de color en mis ojos, mi cabello recogido en media cola ondulado de las puntas.

Me sentía tan... Linda.

—Estas muy linda Thompson—Odeya entro a mi habitación con un vaso lleno de jugo de naranja.

—Gracias a ti Ode—use el apodo que sus amigos usaban con ella. Después de que esa tarde fuéramos de compras descubrí que no era tan mala como yo creía... Sin mencionar que estaba enamorada de uno de los rubios gemelos.

—Yo se a quien se le caerá la baba cuando te vea—bromeó

—Concuerdo con ella querida, James se va a desmayar a cuando te vea.

—Si no es que Papá o Tom se desmaya antes—y como si los invocáramos ambos se asomaron por la puerta.

—No días nada Papá, se lo que piensas y no quiero llorar como con mamá.

Él rápidamente levanto las manos en señal de rendición —No pienso decir nada—

Tom simplemente seguía parado en el marco de la puerta sin emitir un solo sonido, cosa que no paso desapercibida por nosotros, abrió la boca con intención de hablar pero el sonido del timbre hizo que no pudiera y salió rápidamente con intención de abrir la puerta. Por mi parte estaba muy nerviosa que las manos me sudaban y arreglaba mis gafas varias veces mientras varias dudas me atormentaban. 

¿Le gustara como voy?

¿es demasiado?

¿no debí usar maquillaje? 

¿el vestido no será muy inapropiado? 

Sentí una mano en mi hombro que fue la que me saco de mis pensamientos —Tranquila cariño, todo estará bien—

Suspire y trate de sentarme en mi cama pero el grito de mamá me hizo quedarme quieta. 

—¡¡NO TE SIENTES NIÑA, ARRUGARAS EL VESTIDO!!— Los presentes trataron de que mamá se calmara ya que desde que volví de compras con Ode se percataba que todo estuviera perfectamente colocado, el vestido, el maquillaje, el peinado, incluso los zapatos. 

—Querida, tranquilízate Emma se ve hermosa— El sonido del timbre sonó nuevamente  por toda la casa y al saber quien era el responsable todo dentro de mi dio un vuelco que incluso las nauseas se hicieron presentes.

Como era de esperarse mamá fue la primera en salir de mi habitación "caminando" a abrir la puerta mientras detrás de ella salían todos y yo me quedaba parada frente al espejo.

Murmullos provenían de la planta baja y pude distinguir las voces de James y Mau.

Los nervios se apoderaron de mi y lentamente salí de mi habitación tratando de no tropezar con los tacones y mi vestido bajando las escaleras. Las miradas se posaron en mi y por un momento me sentí como una princesa.

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