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"Tan solo mírate Jerry ¿Crees que eres lo suficientemente atractivo para que me atraigas? Ni siquiera me gustan los hombres, me das asco, estás enfermo."

Jerry soltó más lágrimas, abrazo más fuerte a su almohada y enredo la cola entre sus piernas con solo recordar todo lo que su amado le había dicho hace unas cuantas horas atrás.

Horas antes

Había decidido declarase con una carta, la escribió con todo su corazón y todos sus puros sentimientos, cuando su jefe se fue de su oficina, dejó la carta en el escritorio de Jimmy y se fue a su propia oficina.

Horas más tarde, Suki fue a decirle que el Sr. Crystal lo estaba llamando, con los nervios de punta entro a la oficina. Crystal estaba dándole la espalda mirando por el gran ventanal que tenía.

—S-Señor Crystal ¿Me llamó?

— Si.- La cola de Crystal se movía de un lado a otro indicando lo enojado que estaba. — Me puedes explicar ¿¡Qué es esto!?

Jimmy le mostró la carta y Jerry supo que no fue una buena idea declarase, y peor aún, enamorase de ese lobo.

—Señor C-Crystal yo...

—¡Cállate! Me das asco ¿Enserio pensabas que YO te iba a corresponder toda esta mierda que escribiste?

Jerry se quedó callado y con las lágrimas empañaron sus ojos, levantó la cabeza con miedo cuando Crystal lo tomó de su camisa y lo miró a los ojos.

— Tan solo mírate Jerry ¿Crees que eres lo suficientemente atractivo para que me atraigas? Ni siquiera me gustan los hombres, me das asco, estás enfermo.

Las orejas de Jerry estaban bajas mientras escuchaba todos los insultos de su jefe hacia su persona. Pensó que tal vez solo lo rechazaría, nunca espero que lo insultara e incluso lo llamara enfermo.

— ¿Qué es lo que tienes que decir en tu defensa? - Crystal se estaba impacientando al no recibir respuesta alguna de su asistente.— Simplemente aléjate de mí y de Porsha, no quiero que la infectes con tus estúpidos gustos. Vete de aquí, ya me hiciste enojar lo suficiente.

Crystal finalmente soltó a Jerry y este cayó de golpe en el piso, se levantó sacudiendo su pantalón aún con lágrimas recorriendo sus mejillas. Al menos Jimmy no lo había despedido y no tendría que buscar otro nuevo trabajo.

Se sentó en su silla de la oficina con la mirada perdida, miro la carta y empezó a llorar nuevamente, el dolor de su pecho estaba aún presente cada que recordaba lo ocurrido.

Suki apareció de repente en su oficina y trato de que pareciera que no había estado llorando.

— Jerry ¿Qué sucedió con el Señor Crystal? Está muy molesto.

—N-No pasó nada Suki ¿Qué es lo que quieres? - Aún con el corazón roto Jerry mantuvo su hostilidad con la canina. — Si no es nada importante, puedes retirarte.

Suki puso sus ojos en blanco ante la actitud de su compañero.— Solo venía a decirte que mañana ire a ver un Show en el Teatro New Moon. Si el Señor Crystal pregunta por mí, dile que no voy a estar.

— ¿Enserio tienes que irte? - Jerry lo que más quería en este momento es que Suki lo reemplazará en los momentos que tuviera que estar junto a Crystal.— P-Puedo ir yo en tu lugar, así el señor Crystal no sé enojara contigo.

— No, no puedes ir en mi lugar. Eres muy amable, les dirás qué su showcito es muy bueno y que el señor Crystal seguro los elegira.- Suki miro la hora en su tableta y después miró a su compañero. Jerry aún tenía sus ojos rojos del llanto, no sabe que pasó exactamente con Crystal, pero dejaría que Jerry descanse por hoy. — Ya es hora de salir, vete a descansar Jerry.

Diferente Historia |• Sing 2 Crysrry •|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora