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Una semana se había ido volando, Kyojuro estuvo al pendiente de todo lo que su alumno necesitase en ese lapso de tiempo y hoy sería su último día en la finca Mariposa

Ahora mismo se encontraba tomando el sol y un poco de aire fresco en el patio

-Tanjiro va mejorando a buen ritmo-dijo a sus espaldas la Pilar del Insecto

-Kocho, buenos días

Saludo el de cabello flameado

-Buenos días, te quería avisar que Tanjiro podrá irse una vez se complete la intravenosa, solo le encargaré que venga a la rehabilitación, y una vez esta termine podrá regresar a su entrenamiento contigo ¿Está bien?

-Si ,por supuesto. Todo lo que necesite para poder recuperarse perfectamente y volver a entrenar duro- dijo con su tono fuerte y alegre

-Muy bien, escucha aún no puede moverse totalmente por su cuenta, pues necesita el apoyo de un baston y como él camino de tu finca es algo largo de preferencia acompañalo por un tiempo

-Entendido. Sin problemas puedo cumplir eso, Shinobu

-Muy bien yo me retiro tengo una mision algo lejos

-Cuídate Kocho

-Eso haré, adiós

La de puntas moradas se retiro y Kyojuro se levantó para dirigirse a la habitación del Kamado

Cuando estuvo cerca de la puerta ,golpeo un par de veces y cuando la abrió vio al pelirrojo en su camilla leyendo un mensaje preocupado.

Su rostro estaba un poco pálido mientras le temblaban las manos.

-¿Ocurre algo mi chico?

Pregunta el pilar algo preocupado por su expresión

-Kyo... Kyojuro... acabo de recibir un mensaje de mi herrero

Tanjiro le había mandado una carta hace tres días preguntando cortezmente a su herrero si podía fabricar una nueva Katana para el pero la respuesta lo dejo un tanto asustado

-Haganezuka no quiere repararme la espada- le comenta mientras le pasa la carta a su Sensei

Kyojuro leyó la carta pero esta solo estaba llena de insultos "Ya no habrá espadas para ti" "Vete al infierno" "Jódete" "Puedes irte al infierno" "Te odio"

-Mi chico... ¿tu herrero siempre es así? ¿O le hiciste algo?

-Dos veces rompí la espada -responde antes de soltar una risa nerviosa que sorprendió al rubio -Y en una ocasión, poco antes de la misión del tren enojado se acerco con su cuchillo e intento matarme.

-Ya veo...

A Kyojuro se le resaltó una diminuta vena tratando de esconder su enojo de Tanjiro, si se enteraba que su herrero lo intentaba matar nuevamente el se haría cargo pues Tanjiro no tenía la culpa, eso le puede pasar pasar cualquiera

-Que se me rompiera tanto... significa que no soy buen espadachín

-No Mi chico eso le sucede a cualquier espadachín yo también he roto varias en el pasado

El tono de su voz aún era algo fuerte y el enojo no lograba disminuirlo con facilidad por lo que Tanjiro se dio cuenta de la emoción solo con el aroma

-Re.. Rengoku-san ,¿En-Entonces no soy mal espadachín?

Tanjiro se encontraba algo inquieto y temeroso por el cambio de aroma y voz del más alto

Al ver la expresión del Kamado creyo que se dio cuenta de su aroma a molestia por lo que se tranquilizo y se sentó en la cama del menor para poner su mano sobre su cabeza y acariciarla con cuidado

Llama cálidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora