25. Adieu

52 11 3
                                    

   Khira no me culpaba en absoluto de lo que había pasado, pero no estaba segura de si Richard pensaría lo mismo. Su hijo había muerto y alguien le quería muerto a él.
Cuando Richard llegó a casa, yo tenía mucho miedo de cómo reaccionaría, pero cuando le vi, supe que necesitaba el mismo consuelo que Khira y que tenía que ser fuerte por él. Se notaba que había estado llorando y aunque a penas podía hablar, cuando me abrazó me susurró una disculpa.
- Lo siento... sé que le querías mucho.
Yo lo mire sorprendida y acaricié su mejilla.
- Pues claro que sí, como tú, como todos; todos queríamos mucho a Merlin. Pero esto no se quedará así...
Richard estaba destrozado, su dolor atravesaba mi alma y el corazón se me rompía en pedazos. Cuando pensaba como sería perder a Emma... entendía que no valía la pena vivir.
Decidí no perder de vista a Richard ni un segundo, era propenso a las depresiones y no sabía como podía reaccionar ante unos acontecimientos tan escabrosos.
Mantuve el tipo y entre todos organizamos el funeral; iba a ser un día muy duro, ya que nos habían dicho que actuásemos con normalidad y eso significaba ver a David y dejar que nos diera el pésame con falsedad.

    Celebramos una emotiva ceremonia y Khira pronunció unas palabras de despedida. Mientras dejábamos unas rosas sobre el ataúd de Merlin apareció la novia de Richard, Olesia.
- Maldita sea, ¿qué hace esta aquí? - Richard se fue hacia ella enfurecido, la agarró de la muñeca y se la llevó a una zona apartada de todo el mundo. Yo busqué la reacción de David, que parecía algo desconcertado ya que se suponía que Olesia era su amante, no su novia y por tanto no podía presentarse allí. Vi que Richard le hacía gestos de que se fuera, pero Olesia insistía en hablar con él. Decidí acercarme e intervenir en la discusión, haciendo ver que, alertada por los anónimos, la había reconocido y les montaba un escándalo. Me uní a la pareja que discutía, Richard le decía algo de que iba a cagarla presentándose allí, mientras ella, lloriqueaba diciendo que quería apoyarle y estar con él. Aunque estábamos a la vista de todo el mundo nadie podía oírnos, así que intenté poner un poco de orden.
- Escuhad, - ordené - nadie sabe lo que hablamos, podemos salvar la situación. Olesia, tú sales corriendo hacia la salida, y yo - me dirigí ahora a Richard - te insultaré y también me iré. Así a ojos de David parecerá que lo he descubierto todo, ¿lo entiendes? ¿Lo habéis entendido?
Ambos asintieron e hicieron lo que yo había dicho. Cuando Olesia se fue llorando, que lloraba de verdad, agarré a Richard de la camisa.
- Lo siento... - le susurré antes de ponerme a gritar. - ¿Cómo has podido? ¡Te odio! - y salí corriendo dejando al amor de mi vida atrás.
Cuando salí del cementerio encontré a Olesia llorando sentada en un banco. Me dio pena. Ella no tenía la culpa de nada, era la pareja actual de Richard y ni siquiera podía acompañarlo en un momento tan difícil como ese.

 Ella no tenía la culpa de nada, era la pareja actual de Richard y ni siquiera podía acompañarlo en un momento tan difícil como ese

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- Eh... - dije tocando su hombro. Olesia no me gustaba, y aunque no fuera muy inteligente por su parte haber venido al funeral podía ver que se preocupaba por Richard de verdad. - Tranquila, Richard está pasando por mucho. No hagas caso de nada de lo que te haya dicho.
- Es que él no me quiere... - dijo con los ojos llorosos.
- Claro que sí, todo se arreglará, ya lo verás. - dije con una sonrisa. Deseaba que Richard fuera feliz, aunque fuera con otra persona y esa persona fuera ella.
- No, se acabó... me ha dejado. Acaba de cortar conmigo.
- No le hagas caso, es un momento muy difícil para él... 
- ¡Tú no lo entiendes! - Olesia me miró con intensidad. - No es a mí a quién quiere. ¿De verdad no te has dado cuenta? Él no te ha olvidado, no puede y te juro que he hecho de todo para que te olvide, pero no quiere... te adora. No se da cuenta pero siempre te tiene en su mente. Que si a Irene le gustaba esto, que si Irene siempre dice tal cosa... siempre estás presente para él. 
- No digas tonterías, la discusión te ha traumatizado. - dije negándolo todo.
- A veces dice tu nombre en sueños, incluso después de haber tenido un sexo increíble y...
- Vale, vale... no me des detalles. - la interrumpí.
- Siempre está pensando en ti. Lo he intentado, pero no puedo competir contigo.
Observé a Olesia en silencio, se daba por vencida y estaba tan convencida de lo que decía que me lo tuve que creer.
- Lo siento, yo nunca quise estropear vuestra relación. - dije encogiéndome.
- No es culpa tuya. Él es así, decidió no pasar página. Pero si aún sientes algo por él, estará encantado de que vuelvas.
Y sin decir nada más, Olesia se levantó, se limpió las lágrimas y se despidió de mi. Yo aún estaba analizando todo lo que me había dicho. Ojalá todo aquello fuera cierto, pero ni aunque así fuera, ¿qué derecho tenía ahora de volver con Richard?

Soñar es gratis 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora