Fantasias

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Cuándo abrí la puerta quedé petrificada, jamás imaginé verlo así de pie en mi puerta y menos después de todos los insultos que le di...

— Hola mi amor... —dijo

Se acercó a mi y me besó... ni siquiera pude pestañear, simplemente me planto un beso en el que succionó ligeramente mi labio inferior.

— Hola bebé pasa —fue lo primero que se me ocurrió— te estaba esperando...

— Para ti...

Shikamaru me entregó una Hello Kitty vestida de geisha con un ramo de rosas color rosa... literal me dejó sin palabras, sólo uno de mis novios tuvo en algún momento este tipo de detalles conmigo y cuando lo hizo fue porque la había cagado.

— Gracias —sonreí anonadada— que lindo detalle... ¿Quieres beber algo? —pregunté mientras iba a mi kichenet a dejar las rosas en un florero.

— ¿Tu bebes?  —preguntó mientras veía mi departamento

— Sólo vino pero muy poco...

La verdad el vino me pone cachonda y siempre antes de hacer mis videos me tomo una copa, me calienta ahí abajo

— No me molestaría una copa, nos acompañaría para conversar

¿Conversar? ¿Quiere conversar? ¿Me ha visto cara de psicología pajeril?

— Esta bien...

Saqué dos copas y vertí mi vino favorito en ellas, caminé y saliendo de kichenet y él aún miraba el departamento

— Sabes que mirar la casa de una persona de esa forma es de mala educación

Extendí mi mano dándole la copa.

— Gracias —la recibió— lo siento no quise ser maleducado... me gusta se siente acogedor, mi casa es grande.

— Apuesto a que vives con tus padres —él asintió bebiendo un sorbo— tienes cara y look de ser niño pipiris

— Vivo con mis padres como cualquier chico de veinte años, creo que tu vives sola porque no eres de aquí

Asentí y lo que decía era cierto, viviría con mis padres y hermanos si no estuviese aquí

— Tienes razón... ¿Quieres estar aquí en mi pequeña pero acogedora sala? —sonrió— ¿oh prefieres ir a mi habitación?

— ¿Dónde prefieres estar tú?

— Pues —me acerqué a él— no lo sé... si quieres puedo poner algo de música y quedarnos aquí un rato.

— Buena idea...

Le extendí mi mano mostrándole el mueble para que se siente y se ponga cómodo

No sentamos y los dos bebimos de nuestra copa, al principio fue incómodo puse la música suave de fondo pero ninguno de los dos hablaba ¿que podría decirle? ¿que podría preguntarle?

— ¿Y viniste por la universidad o tienes tiempo antes viviendo aquí?

Él rompió el hielo

— Di el examen de admisión sin pensar que aprobaría luego decidí venirme a la suerte, al principio fue duro y pero después pude conseguir este departamento

— ¿Entonces al principio no vivías aquí?

— No —negué con la cabeza— cuando llegué vivía en cuarto cerca de la universidad para ahorrarme los pasajes luego trabajé en McDonalds pero se cruzaban mucho con los horarios, ya sabes los primeros ciclos necesitaba estar todo el tiempo en la universidad por los trabajos, los parciales, la biblioteca y esas cosas... por mucho que mi familia pudiese ayudarme preferí no contarles y no ser una carga para ellos.

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