EN ESTE PEQUEÑO LIBRO PODRAS IR DESCUBRIENDO POCO A POCO Y CADA UNO. LOS FRUTOS DEL ESPIRITU SANTO.
¡Cómo había cambiado el mundo! ¡Cómo cambian los amigos! ¡Cómo cambió la familia!
El cambio en la sociedad. También la iglesia ha cambiado, y oí l...
Campanilla, como siempre no sabescomo empezar ni como decir lo que yo te he dicho, por eso, como antes lo has hecho tú por mi ahora lo hago yo por ti.
Campanilla, todos los frutos vienen del amor, y el Espíritu de Dios es amor. No puedo comprender como los hombres no lo saben ver, y se justifican ellos mismos engañándose diciendo que son humanos, y la humanidad es las que los hace equivocarse, y admiran y se sienten identificados con los que se equivocan como ellos, sabiendo que otros que tienen el Espíritu de Dios, también son humanos y se equivocan, pero de otra manera.
Los hombres se sienten bien cuando ven a otro equivocarse, porque así ellos se pueden justificar, sin saber, creyendo saber mucho engañándose así mismos, que es lo mismo que cerrar los ojos para no ver que el que justifica es Dios.
Ningún hombre se puede justificar a si mismo, es Dios el que justifica a los hombres, precisamente porque Dios ve, a través, no de su humanidad, sino de su debilidad, engañados por el mal que no saben lo que hacen, al caer equivocarse y ser como los demás, también se sienten contentos satisfechos y hasta alegres por ello.
También pueden ver que otros, buscadores de Dios como ellos, se pueden equivocar, y lo que tendrían que ver, es, que espíritu los guía, porque si los guía el Espíritu de Dios, tendrían que llorar cuando se equivocan, no por ser humanos como los demás y alegrarse por ello, porque cuando se equivocan es cuando no saben amar, y si no saben amar o les cuesta trabajo hacerlo, es porque le cierran la puerta o le hacen resistencia al Espíritu de Dios.
Fruto del amor del Espíritu Santo y por lo tanto de Dios, es la Paciencia.
La Paciencia todo lo alcanza.
Y los hombres como siempre se engañan, creen que la Paciencia es descansar, ser tranquilos, estar en paz, esa paz y esa tranquilidad que les dura un momento, un día, unas horas o un tiempo, no es la paz de Dios, no es Paciencia.
La Paciencia no se cansa, no descansa. La paciencia se olvida de si para dar descanso a los demás. La Paciencia, como todos los frutos del Espíritu es activa, y donde los demás ven actividad, la paciencia hace un servicio, no descansa para que descansen los demás que no saben que la Paciencia es el amor en acción.
La Paciencia, ¿no es un fruto del amor?, y ¿el amor descansa?
¿Qué hace el amor? ¿Mira primero para si y después para los demás?
Quien lo cree así no conoce el Amor de Dios, porque quien lo cree así, solo conoce el egoísmo que siempre se mira así mismo antes que a los demás, y solo busca su propio bienestar.
Y a la Paciencia, le dice tranquilidad, y la tranquilidad, le dice descanso, y al descanso le dice bienestar, y al bienestar le dice felicidad, y a la felicidad le dice paz.
Quien piensa así solo se mira así mismo y no mira a los demás.
Y eso no es la Paciencia, se parece mas a la Pereza que deja para "después" para "luego" para "mañana", lo que hoy tiene que hacer.
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