Si la vuelta, era un niño bastante mas alto que yo, bueno normalmente todos son mas altos que yo, tenia el cabello corto un tanto despeinado, y delgado.
-se acerco a mi y me tomo por el hombro- Hola Sasha- dijo en un tono un tanto burlón.
-hola...- nerviosa otra vez, ¿por que siempre me pasa esto?.
-¿entonces vienes de la mañana eh?-camino junto a mi lado- Yo también iba en la mañana, bueno hace un año.
-Si, me tuve que cambiar de turno, ¿ah si?, que bueno- no se me ocurrió otra cosa de decir- supongo que me entiendes- dije después de un breve silencio.
-Bueno, hablamos después- me dijo tajante, y se fue sin darme tiempo de contestar-.
Llegue al salón, fue la primera, transcurrieron las demás clases sin interrupciones, aunque para mi fue eterno el tiempo.
Después de toda la tensión de el día, sino la campana de salida, y avanzaron a los grupos, por fin salida del plantel, afuera me esparaba mi madre.
-Hey Sasha, ¿como te fue? -lo dijo un poco seria- Te veo un poco distraída.
-Pues bien...creo.- no dije más palabra en todo el camino a casa.
Cuando llegue era ya algo tarde, ya que salgo del colegio a las 9 PM, me sentía agotada, no quería pensar en volver ahí, me sentí un poco triste, es decir no tenia amigos y extrañaba a los del otro turno.
Es ahí cuando me di cuenta de lo que mis amigos significaban en mi vida, la falta que hacen cuando no estoy con ellos.
Decidí dormir, espero que mañana sea mejor...
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Mi peor enemigo.
Novela JuvenilNo sabía a lo que me enfrentaba, ni quien era y entonces sucedió...