Princesa erótica - [KarmaGisa]

Parte única

Hola, amigos!

Ali viene a estas aguas de Assassination Classroom, a dejar este trabajito para el KarmaGisa. Originalmente iba a salir en el Fictober del 2021, pero... shit happens jajaja

La idea del Fictober giraba alrededor de la Lencería/Crossdressing. Y, pues, Karma siempre insinuó el cortarle el jr de Nagisa jejeje Fuera broma o no, él tenía fotos de Nagisa vestido de mujer y nadie me va a venir a decir que este chamaco del demonio llamado Karma, nunca se masturbó (aunque sea una vez) con ellas uwu Just sayin'!

Bueno, pues, les dejo leer!

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Karma es un hijo de puta.

Con solo mirar el interior de la bolsa sé que estoy jodido. Porque, obviamente, Karma tiene que traer de vuelta aquellos años de secundaria cuando todos me confundían por una chica. (No, no voy a aceptar que aún sucede. ¡Me niego!)

Una peluca larga del mismo tono que mi cabello azul, lencería color rosado y zapatillas, es lo que hay en el interior. No quiero sacarlo, pero tengo que cumplir con la apuesta.

No debí caer en la provocación de Karma, de ese a quien llamo novio desde hace más de diez años.

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Miro lo que hay sobre la mesa del comedor, ahí donde están los resultados de haber jugado póker contra Nagisa. Mi dulce y asesino novio —a quien logré vencer en una apuesta que planeé por semanas— está encerrado en el baño de nuestra habitación probablemente pensando en las mejores formas de silenciarme. Ah, cómo me excita saber que tengo entre mis manos a una serpiente letal, una a la que quise destruir y ahora venero como a un dios.

No sé si lo sabe o si simplemente lo ignora, pero Nagisa me tiene a sus pies desde el momento que decidí ayudarlo a salvar a Koro-sensei. Y aunque yo lo amo y respeto, mi deseo de verlo ataviado en ropas femeninas que acentúen sus piernas delgadas, su cintura estrecha e incluso que use pelucas largas para realzar sus facciones femeninas, solo ha incrementado con los años. Ocasionalmente ha aceptado algunos de mis caprichos, pero siempre se rehusa a usar lencería.

Por eso, decidí preparar una situación en la cual no tuviera opción, sino que cumplir con un castigo.

Bebo whisky con la satisfacción danzando en mis labios que solo aumenta cuando entro a la habitación y me siento en la cama a esperar por mi princesa.

Escucho la puerta del baño abrirse y el sonido de tacones repiqueteando sobre el suelo. Al alzar la vista casi eyaculo en mis pantalones por la visión sensual de Nagisa: en la parte superior un sostén estilo strapless con una gargantilla y cintas que se entrecruzan entre sí; a la altura de su cintura estrecha el cinturón de dónde cae una falda abierta de la parte frontal que deja a la vista las bragas con encaje y un liguero en cada muslo; en los bíceps están unas ligas con la misma tela de la falda que caen como mangas; y no olvidemos las zapatillas stiletto. Todo el conjunto en rosa pálido que hace juego con el rubor sobre sus mejillas. Y... ¡Oh dios! ¡Cuánto había extrañado verlo con sus cabellos largos!

Ver a Nagisa de esta manera tan sensual y a la vez tímido (quizás avergonzado por estar vestido de esta forma), encendieron en mí el deseo de fragmentarlo como hace años. Sin embargo, esta vez no pelearíamos a muerte.

—Te ves bien, cariño —ronroneo mientras bebo lo último del whisky.

—¡Cállate! —sisea él con un sonrojo cubriendo su faz—. Me veo ridículo.