¿Por qué a mi?

Y si no quiero...

Aguantaba de nuevo en la cola del comedor, esperando pacientemente lo que parecían siglos. Llevo qui tan sólo dos días y ya odio a todo el mundo, en especial la comida de este lugar. Aparecer en mitad del curso en secundaria en un instituto interno rodeada de adolescentes con demasiadas hormonas para mi gusto no es la mejor manera de graduarse de titulo de la ESO. Pero aquí estoy yo, esperando que e den mis albóndigas con patatas par poder comer y continuar con las tres horas de clase que me esperan. No he empezado con muy buen pie. Ya me odian la mayoría de las estúpidas chicas de este lugar y los chicos no dejan de mirarme co mala cara. Por fin me toca. La asquerosa cocinera llamada Sandra me sirvió de muy mala gana mi comida. Es la mujer más borde que han visto mis ojos. Después de darle las gracias con mi sonrisa más falsa, me giro a ver en que mesa me siento. No se donde sentarme. Todas las chicas me miran con sonrisa de superioridad. No tenía pinta de que ninguna me deje sentarme en su mesa, así que salgo del comedor con mi vandeja. No se si está prohibido sacar las vandejas al patio o no, pero no me paro para averiguarlo. Salgo lo más rápido que puedo sin llegar a correr y entro en el patio, pero como tengo la suerte de un orangután pariendo rodeado de leones hambrientos (se que no es podible) me encuentro con las cuatro personas que menos quiero ver.
Que no te importe lo que esos imbéciles te digan tu pasa de ellos. Explico. Ante mi se encontraban los hermanos Brabb. Eric, Lucas, Dani e Iván. Los cuatro chicos más populares del instituto. Eric era el más simpático de todos ellos. Pelo marrón y ojos color miel, Eric podía presumir sin problemas de su físico, trae locas a todas las chicas. Su sonrisa de dientes blancos era simplemente perfecta. Pero que digo es el idiota más grande que ha pisado la Tierra. Por el contrario Lucas no es tan imbécil. Aunque también tiene un físico parecido, los ojos de Lucas son de color azul muy oscuro. No es tan ligón como su hermano pero también tiene sus cosas. Es igual de simpático que Eric y al igual que el siempre tiene una sonrisa en la boca. Dani es el más tímido de los cuatro. Aunque también se le notan sus horas en los gimnasios no presume tanto. Tiene una sonrisa perfecta aunque a diferencia de la de sus hermanos la de el siempre es muy tímida. Sus ojos son del color verde fosforito no es como el verde fosforito pero llama mucho la atención. Por último Iván. Él no es como sus hermanos. Estoy segura de que es el más borde de todos ello y sin embargo y aunque parezca imposible el más atractivo. Casi nunca se le ve una sonrisa (por lo que he oído en clase) y siempre está callado, cuando un profesor le pregunta se limita a mirarle con cara de asesino y baja su vista a lo que sea que esté haciendo. Claro que con sus hermanos no es así, solo hay que verlo haciendo chistes absurdos y metiéndose con ellos. él tiene los ojos grises lo que le da un aire mas misterios. Bueno pues aquí los tenia yo a los cuatro. Mirándome como si fuera un experimento, con curiosidad, aunque sinceramente debo parecer un experimento fallido porque no debo de estar lo que se dice bien. Con mi comida dirigiendo me al banco para comer. Eres patética. Los cuatro se quedaron mirándome mientras me alejaba. Que vergüenza. Sigo caminado aunque se que me están mirando. Llego al banco más alejado del instituto y me siento para que nadie me pueda ver, aunque es un poco tarde.
-No sabia que dejaban sacar la comida al patio. - Eric me está hablando. A mi. Vale tranquila. Responde borde para que se vaya y no te vuelva a hablar en toda su vida.
-Yo tampoco - Eric se ríe ante mi comentario y se sienta a mi lado. Eres estúpida definitivamente. Ni siquiera sabes espantar un chico. Nuevo intento. - quiero estar sola sabes- el tono de mi voz no ha sido de orden, a sido mi bien de súplica.
- y eso? - vale este chico no se entera de que quiero espacio personal, así que decido hacer lo mismo que él, el mismo juego
- Y tu que estás haciendo aquí?
- Te hemos visto sola y no queríamos que nada te pasara bonita - vale eso último se lo podría haber ahorrado. Me estoy poniendo nerviosa. Vale tranquila. Sólo es u chico. Jodidamente perfecto pero un chico al final.
- ya ves que estoy bien, puedes irte.
- y si no quiero...
- Me voy yo- eres brillante
- No
- Perdón?
- No - eres estúpida
- Y que vas a hacer tu para impedirlo - parece pensativo pero se que esta fingiendo.
-No creo que al director le guste que hayas sacado la comida al patio. Si no recuerdo mal está en contra de las reglas del instituto. - y... te ganó
- Qué coño quieres - si, borde pero directa
- Qué me beses
- No, ahora déjeme en paz- me mira mal - Ahora
-Esto no va a acabar aquí
- Estoy segura - se va. E aquí la prueba de lo que buscaba... idiota