The Beasts of the forest

621 47 27
                                    

"The Beasts of the forest "

Las estrellas brillaban en el cielo oscuro, la luna roja brillaba con fuerza, las libélulas y bichos sobre volaban por arriba de los árboles, el bosque con escasa luz donde habitaban todo tipo de criaturas e insectos gigantes.

Una pequeña rana tuerta seguía el camino entre los frondosos árboles, mientras tocaba su acordeón de manera armoniosa, una nota desafinada salió del acordeón al ver una rápida silueta cruzar a su lado, los arbustos se agitaron, las hojas y las ramas chocaron entre si y resonaron en el silencio del bosque.
Retrocedió unos pasos directamente a un arbusto que contenía algunos frutos pequeños, las hojas tintinearon cuando una silueta empezaba a surgir por detrás del arbusto..
Dirigió su mirada hacia atrás lentamente para ubicar a la criatura, era algo que jamás había visto, dio un grito de terror y se echó a correr en cuanto pudo, aún tenía muchas cosas que vivir..

_¡Espera, no te!..._era muy tarde, ya no había rastro de la rana en aquel lugar._ ..Vayas.._ La criatura solo dio un suspiro frustrado.

_Anne, si sigues haciendo ese tipo de entradas nunca conseguiremos ayuda._ La castaña se volteo hacia atrás mientras observaba como su compañera golpeaba con un palo algunas ramas de los árboles para abrirse paso.

_Es divertido, además mira el lado positivo Marcy, en la cueva hace frío, tendremos que seguir acurrucándonos
para estar calientitas._ No obtuvo respuesta, la contraria simplemente se le quedó mirando no muy emocionada con la idea.

_Si, yo no viviré en una cueva el resto de mi vida._ Dijo finalmente, mientras estaba a punto de regresar por dónde vino._ Prefiero acurrucarme en un cálido colchón o algo por el estilo, que hacerlo en la roca fría rodeada de bichos mortales._

_Espera!.._ La pelinegra se volteo ante el llamado._ Mira, son frutos, tal vez sean comestibles, yo espero que si, realmente tengo hambre.._ Su compañera se acercó curiosamente a inspeccionar, los observó un par de segundos para sacar su diario de su maltratada mochila.

_Veamos, no tienen manchas negras, por lo que no son venenosos.._ Arranco uno de los frutos que eran como bayas, pero más grandes y algo ovaladas.._ No tienen algún tipo de pequeñas semillas superficiales, por lo que no dan parálisis, y por último, el arbusto de dónde crecen carece de hojas blancas, por lo que no da algún tipo de efecto como migraña o perdida del conocimiento._ Pareció darle un último vistazo antes de escribir rápidamente algo en su diario.

_Entoncees?.._

_En teoría son comestibles.._ La más bajita cerró su diario de forma firme y lo guardo de nuevo en su mochila, junto con la pequeña pluma que había sacado._ Aún así tendré lista la miel de lobobeja por si acaso tienen algún nuevo efecto que desconozcamos.._

_Ay que bien!, muero de hambre._ Rápidamente tomo unos cuantos frutos y los llevo a su boca empezando a masticar, su sabor era delicioso, la mezcla de dulce, azucarado, con el perfecto toque ácido era realmente una maravilla.

|| Marcanne in Wartwood ||ᵃᵐᵖʰⁱᵇⁱᵃ ᵃᵘDonde viven las historias. Descúbrelo ahora