Una horrible navidad

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La navidad ha sido lo mismo en mi familia durante años.
Todos los años vamos a casa de los Malfoy a la cena y de ahí regresamos a casa aproximadamente entre las 12:30 y las 2 de la mañana. Mi padre toma mucho junto a mi tío Lucius, pero no a buena manera, normalmente se ponen agresivos y antes de nuestra pelea, Draco y yo nos escondíamos en alguna parte de su casa donde no nos encontrarán ya que era más propenso que saliéramos golpeados.

-Recuerda portarte bien y por favor ninguna pelea- mi madre me fulmina con la mirada en la entrada de la tenebrosa mansión donde viven mis familiares.

Mi padre se aclara la garganta y toca a la puerta. Unos minutos después, la puerta se abre dándonos paso al living dónde ya esta mi tío, mi tía y Draco quien tiene una inusual sonrisa, lo conozco desde toda la vida y se que significa; está planeando algo y no es nada bueno.

-Pasen pasen, la comida pronto estará lista. Draco recibe los abrigos de tus tíos y colócalos en el perchero por favor- De mala gana Draco obedece y cuando termina todos nos encaminamos a la sala de estar donde mis padres y mis tíos se pusieron a platicar sobre trabajo pero llegó un momento de la plática dónde nos corrieron.

-Es una estupidez que no nos dejen escuchar de lo que hablan, tenemos 15 años, somos suficientemente grandes para hacerlo- ruedo los ojos ante las quejas de mi primo que se pasea por su habitación mientras yo estaba sentada en su cama observando con detenimiento su cuarto.

Es oscuro como toda la casa pero con la diferencia de que tiene tonos verdosos, tiene una pequeña bandera de Slytherin en la pared junto a un escritorio que tiene pergamino y plumas bien ordenas, hay un estante con varios libros y figuras de porcelana con extraña figura, y su cama es matrimonial con un terciopelo blanco arriba.

-Bueno creo que por ti es que no nos considera mayores- me da una mirada molesta y bufa. Pasan unos 15 minutos incómodos, donde ninguno habla.

-Como está tu novia?- dice con tono burlón. Su pregunta me sobresalta y me causa un tipo de temor -Los rumores viajan muy rápido Tania, deberías saberlo.

-No te atrevas a hablar de ella, no tienes ningún derecho de hacerlo- me levanto con rapidez para imponer seguridad pero la verdad es que estaba muerta de nervios.

Y si su plan consistía en hacerle daño o hacernos daño?

El sonríe orgulloso como si identificará lo que realmente siento y antes de poder preguntar o reclamar nos llaman a bajar a cenar.

A diferencia de las cenas normales, en esta se produce una plática más chismosa que nada. Draco me mira fijamente con la misma estúpida sonrisa que tenía cuando salimos de su habitación.

-Y Tania, cómo está la escuela?- me pregunta mi tía haciendo que la atención viaje a mi. Suelto el tenedor que tengo muy enterrado en el filete.

-Pues está bien, saque excelente en el último examen de Transformaciones y un supera las expectativas en las demás- trato de no sonar orgullosa pues si lo hago empezarán a rebajarme. Mis calificaciones no son muy admiradas en mi familia.

-No entiendo cómo no puede sacar mejores calificaciones, tiene todo lo que necesita- la sonrisa inquietante de Draco se agranda adelantando una respuesta.

-Creo que su novia la distrae demasiado- Un silencio abrumante abunda el comedor. Mi respiración se corta de golpe, mi manos sudan más, mis piernas tiemblan demasiado.

No, no, no, no, no, no, no. Mierda, es mi fin. Estúpido Malfoy.

Las miradas viajan hacia mí y me alarmó más, trato de buscar a mi hermano pero recuerdo que se fue con mi abuela. Parece que mis padres están procesando la información que el idiota de mi primo les dio.

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