Estaciono el carro frente a mi casa y me quedo allí simplemente pensando en lo que acaba de suceder, lo que acabo de hacer. He engañado a mi esposo le he sido infiel, y lo peor de todo es que me gusto que aunque siento culpa, ha sido uno de los mejores momentos, que va momentos no el orgasmo de mi vida y me he sentido tan sensual, hermosa, femenina, complacida y hasta más viva. ¿Como es posible que sientas sentimientos tan diferentes respecto a una misma situación?, no sé cómo entrar a la casa pues tengo miedo de lo que vea en mi Máximo cuando me vea, a lo que recuerdo ni siquiera se dio cuenta que me corte el cabello, me vestí bonita y me maquille no creo que note nada, la verdadera pregunta es ¿podré ocultar mi comportamiento?Apago el carro y me encamino a mi casa, entro y no veo a nadie así que subo directamente a mi habitación para bañarme, cuando entro a la habitación me encuentro con Máximo quien esta recostado en la cama con la laptop en una mesita, asumo que trabajando, el alza la cabeza y me mira;
- Llegaste temprano pensé que vendrías más tarde
- Eh...no la cena termino temprano...
- ¿Como la pasaste?
- Yo... (mi voz tiembla nerviosa y juego con mis manos) bien todo estuvo rico.
- ¿Estas bien? Te noto, (me mira de abajo arriba), no sé cómo nerviosa o alterada.
- (trato de calmarme) Si todo bien, yo voy a bañarme creo que me abrigue mucho y he sudado.
-De acuerdo.
Me dirijo al baño aun un poco alterada, y comienzo a desvestirme, he tenido suerte creo que estaba a punto de colapsar, creo que nunca me había sentido tan culpable y avergonzada en mi vida, siento que he traicionado lo que significaron nuestros votos el día que nos casamos, solo puedo pensar que horrible seria si mis hijos se enterraran de lo que acabo de hacer. Me meto a la ducha y mientras enjabono mi cuerpo no puedo parar de pensar en Amelia, en sus manos tocándome, su boca, tratado de pensar en otra cosa, pero mi mente no me deja trato de avanzar y terminar de bañarme, solo quiero acostarme a dormir y olvidarme del daño que está por venir porque, aunque trate de ignorar es un hecho que de aquí en adelante las cosas van a cambiar.
A la mañana siguiente cuando me despierto comienzo mi rutina normal de todos los días, me visto, orinó, sacos a Max y Benji a fuera, saludo los vecinos, esta vez me encuentro con Jenny, pero sucede algo distinto;
-Hola Micaela, ¿como estas?
-Todo bien Jenny y tu ¿como estas?
-Bien, quería decirte que me encanta como te queda tu nuevo corte, no se, te ves más joven, más guapa.
-Oh, (digo sorprendida), gracias no esperaba que lo notaras, me gusta mucho a mí también...
- pero que dices si es imposible no notarlo, te hace ver súper atractiva, (se pone roja de momento) oh perdón, yo creo que pensé en voz alta. (Dice nerviosa)
- (me sonrojo) Bueno al parecer no tanto porque Máximo ni se ha dado cuenta.
En el momento que mis palabras salen de mi boca, me arrepiento, que hago contándole mis problemas matrimoniales a una vecina, que pensara de Maximo.
- Oh lamento escuchar eso, entre tú y yo, (mira a los lados y baja la voz) él se lo pierde.
Nos reímos las dos a carcajadas.
- Gracias, ha sido agradable saludarte Jenny me alegro de que estés bien, cuando quieras puedes pasar por la casa, es esa que está allí y nos tomamos un café o un vino.
- Gracias por la invitación lo tendré en cuenta...Cuídate
- Tu igual
Comienzo a caminar hacia la casa y Jenny se aleja al sentido contrario, pero no logro ver donde vive aun, ya que dobla hacia otra calle. Es increíble que Máximo no pueda notar mi nuevo corte de cabello, y una vecina lo note a la primera, mi mañana había comenzado bien, pero me he puesto de mal humor. Entro a la casa y voy a despertar los gemelos, para mi sorpresa Pamela ya está vistiéndose;
- Buenos días mama (me sonríe)
- Buenos días a ti también, ¿como es que ya estas casi lista tienes alguna practica hoy temprano?
- (Sonríe) No, simplemente quería llegar temprano para repasar unas cosas con Sofía.
- Entiendo, me alegra escuchar eso, mándale saludos a Sofía de mi parte.
- Lo haré
Alex también ya está casi listo, pero eso no me sorprende él siempre se levanta temprano, camino hacia mi habitación donde se encuentra Máximo;
- Buenos días, que te gustaría desayunar hoy.
-Voy un poco tarde, compro algo de camino al trabajo.
Me da un beso en la mejilla y luego se marcha, me quedo parada en la puerta de la habitación sin saber cómo reaccionar, creo que en 20 años es la primera vez que no desayuna aquí en la casa y se va tan temprano, ya ni siquiera me importa que no se diera cuenta de mi corte nuevo, siento en mi corazón que algo está pasando con Máximo, definitivamente tengo que hablar con él. Bajo a la cocina preparo el desayuno y me siento con los gemelos a desayunar, ninguno de las dos preguntas por su padre, cuando terminan ambos se despiden y se van a la escuela, recojo, limpio todo y me dirijo a mi oficina a trabajar.
Me siento frente a la computadora, pero mi reunión no es hasta dentro de una hora así que me dirijo a Facebook y busco Amelia Seguinot, y rápido aparece una foto de Amelia sentada en una roca en lo que aparenta ser una montaña, esta vestida como si estuviera haciendo ejercicios. Abro su perfil y quiero ver más, pero lo tiene para que solo sus amistades puedan ver lo que publica, así que me debato en si mandarle una solicitud de amistad o no, lo pienso unos minutos mientras batallo mentalmente me digo; ¿qué es lo peor que puede pasar? Que no la acepte y me ignore, así que luego de meditarlo un rato le doy a enviar solicitud de amistad.
Me dispongo a esperar por mi reunión de trabajo, mientras despido Chequia unos emails, cuando está a punto de comenzar la reunión veo que ha aceptado la solicitud, maldigo pues ahora no puedo ver su perfil hasta después que termine la reunión, una hora después cuando termino la reunión, abro el Facebook y voy a ver el perfil cuando me percato que tengo un mensaje de Amelia, mi corazón comienza a palpitar rápidamente;
- Hola Micaela, espero que estés bien, me alegra mucho que quisieras saber de mí, temía que no quisieras contactarme más por lo que sucedió, me gustaría poder vernos de nuevo, pero esta vez ir a caminar un rato y hablar. Déjame saber qué te parece. Por cierto, olvide decirte lo hermoso que te queda ese nuevo corte de cabello, te hace ver más atractiva y joven. Espero con ansias tu respuesta. Un beso.
Releo el mensaje varias veces y no sé qué responderle, vernos de nuevo es arriesgado pues no sé qué sucede, ya que cuando estoy con ella es como si mi cuerpo no respondiera y actuara solo. En lo que pienso busco su perfil, tiene pocos amigos y pocas fotos, al parecer no publica mucho tiene algunas fotos de comidas con paisajes hermosos en el fondo y algunas con unas amistades, me percato para mi sorpresa que tiene una foto con Jenny, si con la que me cruzo todas las mañanas, como demonios se conocen, esto me pone nerviosa y cierro sin contestar el mensaje a Amelia.
Recibo un email de trabajo, necesitan que una persona haga un viaje a California, me han seleccionado como una de las personas que están considerando enviar, respondo que no tengo problema con ir si me necesitan. Me vendría bien una escapada de todo esto. Continúo trabajando per mi mente no puede dejar de pensar en la foto con Amelia y Jenny, no entiendo cómo es que se conocen, esto me preocupa mucho y bueno me da un poco de celos y decepción, si estuvieron juntas Jenny es mucho más atractiva que yo, yo no soy más que una vieja.
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Conociendo a Micaela
RomanceMicaela es una mujer de 45 años con raíces afroamericanas y latinas, que está consumida por la rutina del diario vivir, casada hace 20 años con un marido que la ignora por completo y dos hijos en plena adolescencia. Llegara a su vida Amelia y Gonza...