Acosado por un psicópata - Huening Kai 𝗫 TXT

┉┈♡̷۫۫ Cap 6

Las clases continuaron normales luego de la introducción de Taehyun y el nuevo profesor, algunas chicas incluso comenzaron a acercarse a mi en los recesos para preguntarme sobre Taehyun; sus pasatiempos, que cosas le gusta, que tipo de chica es de su interés, si tiene novia, etc. ¡Que diablos voy a saber yo si recién lo conocí ayer, pregúntale tú mismo si tanto quieres saber! Nunca llegare a entender a las mujeres.

— ¡Hey Kai! —La voz de Soobin fue como un salvavidas en este mar de mujeres, por lo que, aunque sin ganas de acercarme a él, me levante para escapar de esta situación.

— ¿Qué quieres ahora? —pregunte exhausto. Las chicas si que me dejaron cansado, pero eso no evitaría que me olvide de evitar hablar sobre el en la escuela. Mas aun con Taehyun ahora asistiendo en mí misma clase.

— Quería pasar el descanso contigo, que te parece ¿aceptas? — una sonrisa tomo forma en su rostro mientras me miraba con unos ojos expectantes. Tenia unas ganas de negarme y descansar tranquilamente en algún lugar, pero él era el único que sabia el tema sobre el acosador, por lo que termine aceptando de mala gana.

— Esta bien, pero debe ser en la azotea si o si— agite mi cabello frustrado mientras miraba que nadie estuviera cerca. Soobin parecía algo sorprendido con mi respuesta, como si estuviese esperando un rechazo de mi parte, ¿Qué imagen tiene de mi este chico? Luego de unos minutos de reflexión, Soobin puso una sonrisa mas radiante mientras tomaba mi mano y dirigía el camino. En situaciones como esta, este chico lucio mas como un niño pequeño que un adolescente.

Al llegar al lugar, nos sentamos apoyados contra la pared a un lado de la puerta y comimos nuestra comida. Hablamos por unos largos minutos hasta que mi celular vibro, interrumpiendo la conversación, ha de ser otro mensaje...

— Que ocurre, ¿acaso es el otra vez? — el tono de Soobin cambio al momento en que menciono a esa persona. De alguna forma, cada vez que Soobin hablaba de esta manera, me ponía un poco nervioso. Siempre que se trataba del tema de mi acosador, su personalidad daba un giro drástico.

Luego de pensarlo un rato, decidí mostrarle lo que el mensaje contenía.

"Recuerda Kai, me estaré acercando poco a poco a ti, para poder aislarte de todos los demás y que solo yo pueda observarte. Eres la cosa mas preciada que la vida me pudo dar, y no dejare que nadie te aparte, terminaras dependiendo solamente de mí.

Te amo."

— El piensa que eres de su propiedad, ¡que maldita broma! — un fuerte golpe resonó en el lugar luego de que Soobin azotara su puño contra la pared para liberar su ira. El silencio domino por unos minutos hasta que Soobin recupero su actitud anterior y poner una sonrisa tranquilizadora en su rostro.

— No tienes que preocuparte por las cosas que ese enfermo te envía, Huening— dijo mientras se levantaba y se paraba frente a mí, tendiendo su mano para ayudarme a ponerme de pie— Después de todo, no dejare que ese bastardo toca un solo pelo de ti, te protegeré— finalizó. Al momento en que tome su mano, de un tirón me levanto frente a él, nuestros rostros quedando relativamente cerca. Antes de poder alejarme, Soobin me rodeo con sus brazos y me envolvió hacia su pecho, acortando la distancia restante que quedaba entre nosotros.

Quede desconcertado y confundido por la repentina acción de Soobin. Nunca había tenido un contacto demasiado intimo con las personas, ni siquiera con mi padre, por lo que esto me hacia sentir un poco incómodo. Cuando traté de alejarme de su abrazo, pude escuchar como la puerta que guiaba a la azotea comenzó a abrirse.

— ¿Kai? — al momento en que escuche la voz que pronuncio mi nombre, pude reconocer al instante a su dueño, después de todo, hablamos por todo el camino hasta la escuela, era Taehyun. La situación en la que me encontraba era demasiado incomoda y las palabras no salían de mi boca cuando trataba de explicar.

Cuando fijé mi mirada en Taehyun, pude ver que un grupo de personas se acercaban a sus espaladas, posiblemente a entablar una conversación con él. Ahora completamente avergonzado, logré zafarme del abrazo de Soobin y corrí escaleras abajo evitando las miradas confundidas de la gente que se encontraba subiendo.

Corría ciegamente por los pasillos, no me atreví a mirar nada mas que el piso, no quería enfrentar la mirada de nadie en este momento, pero a causa de ello terminé chocando contra una persona, derribándola y cayendo encima de él. Me apresure en levantarme para disculparme completamente avergonzado, pero al ver de quien se trataba mis palabras quedaron atoradas en mi garganta, poniéndome mas nervioso aun, era el nuevo profesor, Beomgyu. Las miradas de todos los que pasaban se posaron en mi al ver que no hacía ni decía nada como disculpa, algunos riéndose y otros juzgando.

No quería, las miradas de todos estaban en mí y no podía pensar con claridad, no quería llamar la atención, no quería. No vi cuando el maestro Beomgyu se había levantado y me estaba hablando, solo corrí queriendo escapar de todo. Guardé todas mis cosas al entrar en mi salón y salí sin que hayan finalizado aun las clases de la escuela, decidido a esconderme en un parque cercano para evitar la interrogación de cualquier persona en casa.

—¿Disculpa, no deberías estar en la escuela? —la voz de un chico me saco de mis pensamientos, levantando mi mirada a uno de los columpios que se encontraban frente a mí, en el, un chico de tez algo pálida, unos ojos cafes, cabello rojo con las puntas de color negro se encontraba ahí. Vestía una capucha negra, ocultando la mitad de su rostro, y unos jeans azules con unas zapatillas deportivas negras.

— Eso no debería de importarte— respondí enojado, mis pensamientos eran un lio en este momento como para hablar con alguien. Quite mi mirada de aquel chico y mire mis manos entrelazadas, soltando un largo suspiro, mi humor era pésimo en este momento.

—Ah, disculpa por preguntar de la nada eso, no debería de entrometerme en asuntos ajenos, es sólo que me alegraba de conocer a alguien de mi edad y quería charlar un poco. Pero como no sabía iniciar una conversación, pregunte casualmente el tema de la escuela, disculpa— dijo de forma nerviosa, mientras se acercaba lentamente y se sentaba a una distancia lejos de mí. Lo que encontré un tanto gracioso.

De alguna forma, este chico parecía un poco interesante, sin saberlo, mi mal humor se esfumo reemplazado por la curiosidad.