Acaricio el agua que llega a la orilla mientras observo a Dylan pillar otra ola. Cuando parece que las olas ya no le molan tanto se sienta a horcajadas en la tabla y me hace una seña para que entre al agua con él.
Me levanto de la orilla y entro lentamente. Cuando el agua me llega por la cintura me tiro a esta y nado hasta él.
Intento hacer pie pero me doy cuenta que no puedo.
—Vaya, esto está más hondo de lo que pensaba.
—Ven. —da palmaditas a la tabla, haciéndome hueco.
Suspiro y me impulso con las manos para subirme a la tabla. Me coloco a horcajadas como él y quedamos de frente el uno al otro.
—¿Que tal te parece lo que he hecho? —pregunta pero no puedo concentrarme porque una gota de agua está bajando su pecho lentamente hasta llegar a la cinturilla del bañador. —Grace.
—¿Eh?
—Te digo que qué te ha parecido. —repite sonriendo, está claro que se ha dado cuenta de mi mirada.
—Eh... Bien, si, muy bien.
Asiente sin dejar de sonreír.
—¿Sabes? Siempre me ha parecido que esto... Surfear, es mágico. No me preguntes por qué. Mi hermana lo llamaba bailar sobre el mar.
—¿Bailar sobre el mar?
Asiente mirando el agua y de repente parece que ya no está aquí, sino en algún recuerdo con su hermana.
—Yo quiero bailar sobre el mar. —susurro intentando traerlo de vuelta al mundo real, cuando veo que su mirada se entristece.
—Pronto lo harás.
Le sonrío. De repente una pequeña ola nos arrastra un poco y ambos reimos al unísono.
Lo miro seria de nuevo.
—He... He visto tu fondo de pantalla, ¿Es ella?
Asiente con los labios apretados y apartando la mirada de mi hacia el agua, de nuevo.
—Me gustaría haberla conocido. —susurro y no logro comprender por qué estoy susurrando. Es como si hablara más fuerte fuera a... Espantarlo.
—Y a mi me habría gustado que la conocieras.
Aún no me mira. Nunca pensé que me molestaría que no me mirase.
—Dylan, —por fin alza la vista hasta mi rostro. —¿Estas bien?
Traga saliva y asiente. Me río amargamente.
—Estas mintiendo. —susurro, de repente triste porque no me cuente la verdad.
Y no tengo motivos. Es solo que con él es la única persona que sin darme cuenta me estoy... Abriendo. Le estoy abriendo las puertas a mi corazón y le estoy diciendo "adelante, pasa y destroza mi corazoncito chuchurido" y darme cuenta que él no hace lo mismo... Me duele.
Suspira.
—No, Grace. No estoy bien. Ya casi hace tres putos años que se fue y no lo consigo olvidar... Incluso mis padres lo han superado. Aunque claro que lo han superado, ellos no supieron ver lo valiosa que era... Que aún es a pesar de que no está. Ellos no la supieron querer... Le hicieron daño por una maldita tontería, Grace. Tus padres son los que se supone que te tienen que proteger de los monstruos, no ser ellos los malditos monstruos.
Vaya.
—Pero... —vuelve a hablar. —Otro día te lo contaré todo, si tú quieres ¿Vale? Hoy... Vamos a divertirnos.
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BAILANDO SOBRE EL MAR ✔️
Romance«Fue como una ola arrasadora; me dejó tirada en la orilla y sin bañador» «Si esto es acto del destino... que alguien me dé su dirección para ir a cagarme en sus muertos» (...) Grace se va a pasar el verano con su hermano mayor en un intento desespe...