Maria: David, no te burles de ella así si no quieres que también te ponga pañales.
David: Pero es que es verdad y no me estaba burlando de ella.
Un calor se apoderó de mi rostro, sentía como me sonrojaba cada vez más y más, esas palabras y la forma en que lo dijo... no aguante más de la vergüenza y me puse a llorar.
Maria: Mira cómo está, la hiciste llorar, ve y discúlpate con ella.
David: Lo siento Laura.
***Laura sigue llorando***
Paola: Hija, pero... ¿Qué pasó?
Laura: no lo quiero aquí – dije susurrando al oído de Paola.
Maria: ¿ves lo que provocas? lo siento mucho... Vas a estar castigado por varios días muchachito.
David: Pero mamá...
Maria: Pero nada, sabes que no te debes de burlar de la gente o insultarla, es muy feo.
David: es que no me estaba burlando...
David y su mamá salieron de la habitación, Paola comenzó a sacar todas las cosas que se podían ver a simple vista y las ocultó, la ropa, los pañales, los biberones y los chupones, no paraba de disculparse, yo solo me cubría el rostro con las sábanas y escuchaba a Paola decir lo mucho que lo sentía, de fondo logré escuchar que la puerta se abre y alguien tira de las sábanas... un beso, fue lo que sentí y salió corriendo de la habitación, Paola se quedó parada mirando perpleja y con una sonrisa tan grande que no pude evitar reír.
Paola: ves, eso quiere decir que no está todo perdido con David.
Esta vez sentí que mi rostro se sonrojó aún más que la vez anterior y no quería salir de mi cama, sabía que necesitaba un cambio, pero era tanta la vergüenza que sentía que no podía quitarme las sábanas del rostro.
Paola: Hija, te tengo que cambiar ese pañal sino te vas a irritar y duele, creeme, sé por qué te lo digo.
Laura: es que no puedo, no quiero.
Paola: bueno, tapate todo lo que quieras, pero te cambiare de todas formas.
sentí como levantaba las sábanas desde los pies de la cama y yo seguía con el rostro tapado, Paola me comenzó a quitar los pantalones, seguido de la ropa interior y por último el pañal, me limpió y me coló un pañal nuevo, este era distinto a los demás, se sentía un poco más abultado que de costumbre así que me quité las sábanas de encima y me puse a observar que clase de pañal me había puesto.
Paola: este pañal es nuevo, absorbe más que los otros y ya es tarde, no quiero que te levantes al baño en medio de la noche, así que si sientes ganas solo te haces encima, ahora si quieres hacer popó me avisas, sabes que estaré en la habitación de al lado.
Laura: Está bien.
Ya era media noche y no podía dormir, ya había utilizado el pañal varias veces y pareciera que nunca se llenaba, necesitaba distraer mi mente de lo ocurrido esta tarde, pero no podía dejar de pensar en ello, ese beso fue una sorpresa, eso quiere decir que le gusto con los pañales y todo. Cada vez que recordaba todo me sonrojaba más de lo que ya estaba hasta que fui interrumpida por las ganas de ir al baño más grande que había tenido nunca, intenté llamar a Paola, pero las palabras no salían de mi boca, no que quedó de otra que solo hacerme encima y luego ir a su habitación.
Laura: mamá...
Paola: Mmm...
Laura: necesito un cambio.
Paola: el pañal aguanta bastante, ven y duerme conmigo.
Laura: es que hice popó.
Paola: está bien bebé, ven vamos a tu cuarto para cambiarte.
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Mi niñera y yo (Bebé A Los 12) Parte II
FantasiaYa sabemos la Historia de Esteban, ahora nos toca saber la Historia de Laura y todo sus secretos... Althurn: un pueblo desconocido y misterioso para muchos, pero para sus habitantes es algo más que solo un pueblo, es su universo. Lago Amber: lugar e...