Me despido de ti.

única parte.

La ansiedad consumía a aquel hombre que caminaba desesperado por la gran sala de aquella casa, ¿Por qué no llegaba?, Esa duda estaba en su cabeza, soltó un suspiro frustrado y paso las manos por sus cabellos rebeldes, observó el reloj que se encontraba en la pared y frunció su entrecejo al ver la hora, nueve y media de la noche y el no llegaba.

Frustrado y enojado agarro el marco de fotos que se encontraba en un mueble de ahí y lo arrojó contra la pared a su vez que gritaba.

¿Cómo se atrevía a dejarlo plantado?. Ese gran imbécil se iba a arrepentir.

Vio los pedazos rotos de aquella foto y se fue directo a la habitación a su vez que comenzaba a aflojar el nudo de la corbata, no podía creer que todo su esfuerzo se estaba arruinando,salió temprano de su trabajo, preparó la comida favorita de ese estúpido rubio, se arregló y por primera vez pudo peinar perfectamente su revoltoso cabello para ese imbécil  que debió haber llegado a las siete en punto.

Todos  sus esfuerzos por querer recuperar su relación se estaba escapado de las manos.

Al escuchar ruido en la sala bajo corriendo para encontrarse con aquel rubio que estaba dejando su elegante túnica en el sillón.

—¿Dónde estabas?.–pregunto serio a la vez que apretaba su mandíbula y se cruzaba de brazos.

El rubio lo volteo a ver, ladeó un poco su cabeza para finalmente pasar a su lado con pereza.

—Sabes donde estaba, es absurdo que lo preguntes Harry.–respondió sin importancia a la vez que se comenzaba a encaminar hacia las escaleras.–¿Vas a salir así?.

Harry frunció su entrecejo ante la respuesta de Draco y sin tiempo que perder camino tras de él.

—Hoy es nuestro aniversario, Draco.–hablo entre dientes viendo como el nombrado no se inmutaba ante sus palabras.–te había dicho que vinieras a las siete, cariño.

Al llegar a la habitación, Draco miro a la perilla de la puerta para luego cerrar por unos segundos los ojos.

—¿Es hoy?.–preguntó sin importancia para finalmente entrar a la habitación y dirigirse hasta el clóset.

Harry abrió a más no poder los ojos, el enojo en el estaba creciendo a más no poder, se metió a la habitación y se quedó viendo como Draco buscaba algo del clóset.

—No me estés jodiendo, te llevo la semana recordando la llegada de este día, te dije que tenía organizado una cena para los dos...¿y tú?,tú simplemente lo olvidaste. ¿Porque no llegaste a tiempo?.–pregunto cansado, enojado y triste.

Draco solo lo ignoro y solo saco una maleta para comenzar a guardar sus pertenencias, podía sentir la mirada de Harry sobre el, podía sentir el dolor de l moreno pero la decisión ya estaba tomada y si el no lo hacía sabía que Harry tampoco lo haría.

La habitación estaba en un silencio incómodo y lleno de tensión , cuando el rubio estaba por acabar miro de reojo a Harry quien tenía los ojos borrosos debido a las lágrimas, mordió un poco su labio y con pesadez cerro la maleta no dijo nada hasta que Harry explotó.

—¿¡Estás jugando!?.–pregunto gritando y desesperado ante las acciones del rubio.–¡Maldita sea Malfoy, contesta!.– se acercó a el y lo tomo de la camisa con fuerza.

Draco solo veía a Harry romperse frente a el y aunque quisiera abrazarlo y decirle que todo estaría bien, que todo iba a pasar como las veces anteriores aunque ambos sabían que era mentira, suspiro pesado y se tuvo que tragar todas esas ganas de abrazarlo.

—¿Acabaste con esto?.–pregunto serio al mismo tiempo que deshacía el agarre que Harry tenía en su camisa.

Harry solo miro incrédulo, soltó una risa triste para luego limpiarse las lágrimas que comenzaban a salir.

—T-tú...tú no puedes hacerme esto...¡Tu no puedes acabar con esto así!.

Draco sonrió de forma ladina para solo negar, se dio la vuelta y cerro Los ojos para evitar que las lágrimas escaparan..

—Esto acabo desde hace mucho Harry, abre los malditos ojos, esto es una porquería. Estás esperando algo que yo ya no puedo darte.–hablo de forma brusca a su vez que tomaba la maleta y comenzaba caminar hacia la puerta.

El moreno cerro los ojos de golpe, sabía que Draco tenía razón, sabía que si había acabado en parte era culpa suya el fue inicio esto con la primera infielidad de su parte.

—N-no tiene remedio, ¿Verdad?.–pregunto con la voz rota a su vez que se abrazaba así mismo.

Draco se detuvo en el umbral de la puerta al escucharlo, trago sus lágrimas al escuchar a su pequeño ángel roto y finalmente negó.

—Nunca lo tuvo Harry, es lo mejor para los dos y sobretodo para los niños.–trato de sonar serio.–te enviaré los papeles del divorcio y cuando los niños lleguen de Hogwarts hablaré con ellos.

Y sin más Draco salió de la habitación cerrando la puerta tras de él, dejando solo a Harry, sintió la primera de muchas lágrimas resbalar por su mejillas para luego murmurar un pequeño lo siento y finalmente irse de ahí.

Harry al estar solo en la habitación rompió en llanto a la vez que caía al piso, sabía que era lo mejor para ellos y para sus hijos pero dolía demasiado, aunque también pudo notar el gran acto amor por parte Draco hacia ellos....