Akane es una chica proveniente del Planeta Izúkaro. Un planeta anteriormente habitado por la raza más temida: La Raza Saiyan. Esta raza, ya no es común. encontrártela, pero si lo haces, cuidado, y más si llevan cola.
Akane, es una "Diosa" de la cre...
-Como lo oyes. Tú Morirás hoy. Aquí. Y ahora. Vegetto se ha encargado de Zamasu. Y Zeno-Sama destruyó el universo. Ahora mismo estás siendo transportada a la tierra. Tus heridas son graves. Intenta no preocupar mucho a los demás. Volverás con ellos cuando reúnan las esferas para invocar a Shen Long.
-¿Y Wiss?
-Wiss podría curarte pero no quitarte la enfermedad. En el otro mundo hay algo que tal vez te pueda ayudar. Los Kaio-Shin lo deberían saber.
-Vale...—No lo voy a negar... A veces pienso que soy un trozo de mi... pero no puedo ser Diosa, Guerrera, y Madre a la vez...
Cerré los ojos y los abrí de nuevo: Viendo el paisaje de siempre. Estábamos en Corporación Cápsula.
-No Akane, no puedes Irte! No me dejes...
[Para las escenas emotivas me gusta que nadie narre. Así qué aquí vamos] [★NO ONE NARRATES♥︎]
Estaba tendida en el suelo. Pero aún asi Gokú mantenía su agarré firme (el del estilo princesa aguantó mis hombros
-H-hey. No te preocupes. -Dijo la Saiyajin. Que se preguntó como se veía, deplorable? Patética? Eso no importaba. Se sentía humillada. Ella! Akane! Casi una Diosa!
-Mamá(?-Vino Goten corriendo -Mamá no te mueras por favor! -Abrazo a la Saiyajín Fémina
-Mi vida, este es mi destino. No te sientas mal -Giró su cabeza a un lado para escupir ese líquido rojo espeso que se iba haciendo negro. -Cuida bien de tu Hermana. Y de tu padre.
-Si -Sollozó el menor de los Saiyajin. -¡Te prometo que lo haré, Mamá!-.
-Tal vez haya algo que quiera decir. -Dijo la Saiyajín. -Por favor. Olvídame. En el periodo que yo esté "fuera".
Las Lágrimas de Son Gokú se hicieron presentes.
-Oh, n-no llores cariño- Le replicó la mujer. -Sabes una cosa? -Le limpio las lágrimas pero a causa de esto. Le dejo un pequeño rastro de sangre en la mejilla. -Recuerdas... cuan-cuando eramos dos niños pequeños. Y entrenabamos con Krillin y el Maestro Roshi. Sinceramente echo mucho de menos esos tiempos... donde entrenar y dormir era lo único importante. No teníamos que preocuparnos por la gente malvada de este mundo...
-No digas eso. No hables. Saldrás sana y salva...
-Gokú, no estoy bien. Ya casi no puedo respirar... tengo los pulmones perforados
-No hables. Guarda algo de energía... -El Saiyajín estaba tembloroso...
-A veces sentía que moría. Hasta que sentia tu toque. Cuando no estabas... me derrumbaba. Es solo el amor. Solo el amor puede doler así. Tus besos queman en mi piel... No te imaginas como te amo. Porfavor cuida a los niños. Se que puedes lograrlo. -La Saiyajin con su última gota de fuerza. Elevó la cabeza besando a su esposo. -. Te amo. T-todos us..tedes. cuídense mucho Amigos!-Así. La Saiyajín Fémina dio su última palabra y... falleció.
El cuerpo de la Fémina se fue desvaneciendo en los brazos de su hijo e marido.
---------------‐-----------‐-------------‐-‐ Ya habían pasado tres meses y medio de la brutal batalla contra las Deidades
-¿Otra vez entrenando? -Preguntó ####
-Claro... Kirane Gikian. Fue corriendo y se abrazo a mi. -Oye basta! Jaja!
-Qué te pasa akane?
-Extraño mucho la tierra. Extraño a Gokú a Goten... a Hikari, a Keiichirō. Los estimo a todos.
-Ow- Ven. -Me abrazó y sentí una luz brillante que nos envolvió a las dos. Apareciendo en Corporación Cápsula...
-¿Go... kú? -Me volteé a verle. Corrí en su dirección y lo abracé con todo mi cariño posible. -¡Gokú! -Me tomó y me alzó al aire. Luego. Salude a Goten, Hikari. La familia Vegeta. Piccolo. La familia de Krillin. Yamcha. Y el Dios Destructor.
-Buenas tardes a todos! -Saludé con entusiasmo. -¿Cómo se encuentran? Estos tres meses fueron largos, ¿Eh? -Hablé.
-¡Maldita! -Keiichirō se me tiro encima a abrazarme -Cómo vuelvas a morir... te juro que... -Calló inesperadamente. -Quién- -Se lanzó corriendo a darle un sermón.
-¡Oye, Maldita! -Así comenzó su discurso...
「In the night.」
Acabé de fregar los platos y subí al dormitorio: ahí. Me apañe con lo primero que vi y me senté en el colchón. Gokú estaba dormido abrazando su almohada. Hasta que sentí su tacto en mi cintura. Sonrío por debajo la colcha blanquecina.
-Gokú, debes descansar. -Le reclamé.
-Mmmj -Soltó
Reí bajo y recogí mi cabello en una coleta.
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Me estire en el colchón quedando de frente con el Saiyajín. Que fortaleció su agarré. Poniendo mi frente en su pecho. Bese su mejilla. A lo que el Saiyajín respondió con un beso en la coronilla.
