El Hilo Rojo (REESCRIBIENDOLA)

Roci, ya vamos por ti!

Cap 18

Ya el operativo había comenzado y Las Mosqueteras y B2 se dieron una tregua para poder llevar a cabo este operativo, salvar a sus amigas y desmantelar esa red de tratas de blancas y prostitución. Por su parte ya Rocio sabía muy bien donde estaba y va a aprovechar lo más que pueda para ayudar en el operativo desde adentro.

Aún Rocio guarda su verdadera identidad por si hay micrófonos o cámaras en el cuarto. Misuk y Jiyu están completamente desconcertadas y asustadas. Rocio por su parte disimula y muestra temor e incertidumbre pero ella sabe muy bien que es cuestión de tiempo para que sus amigas estén allí, ella conoce muy bien a sus superiores y sabe que ya deben de estar trabajando en rescatarlas y en el proceso capturar y desintegrar esa red.

Xxx:—abriendo la puerta y entrando con dos hombres más—vamos el jefe las quiere conocer—comienzan a atarle las manos y vendarle los ojos

Misuk:—llorando–a donde nos llevan

Jisuk:—llorando también—que van hacer con nosotras

Rocio:—casi gritando—Por favor no nos hagan daño

Cuando terminan de vendarle los ojos les tapan la boca con un pañuelo y se las llevan. Rocio va pendiente a cualquier sonido, voz o ruido para estar alerta. Llegan a una oficina donde está el jefe y tres hombres más.  Les quitan las vendas de los ojos. El "jefe" tiene un antifaz para que no puedan ver su rostro. Rocio mira atentamente a cada uno de los hombres y nota a uno con un vendaje en el rostro y supo de inmediato que ese fue el que la secuestró.

El jefe: Bienvenidas hermosas, espero que mis hombres las estén tratando bien.

Rocio: Que quiere de nosotras??—dijo con voz altanera

El jefe: Veo que eres brava—dijo sonriendo

H1: Brava? Esa es una fierecilla—señala su rostro—esa maldita desgraciada fue la que me hizo esto

Rocio:—se ríe—Eso es para que aprendas a tratar a una chica, animal—dicho esto él le da una bofetada que Rocio giró la cara con dolor y comenzó a sentir el sabor a metal en su labio inferior

El jefe: Que te pasa idiota—lo toma por el cuello de la camisa—ten cuidado con la mercancía

H1: A esta fierecita hay que domarla

El jefe: Eso dejamelo a mí, no vuelvas a tocarla—lo soltó, se acercó a Rocio y con un pañuelo le limpió la sangre con mucha delicadeza y las lágrimas que bajaban por su hermoso rostro—eres muy hermosa—le dijo mientras le acariciaba la mejilla donde recibió la bofetada—como te llamas?—Rocio le escupió en la cara y cuando H1 iba a volver a golpearla el jefe lo detuvo—te dije que no la vuelvas a tocar—le gritó mientras se limpiaba la cara—va a ser un placer el domarte fierecilla

Rocio: Que quiere de nosotras?

El jefe: Eso lo sabrán a su debido tiempo—acarició la mejilla de Rocio y esta volteó la cara—llevenselas—le volvieron a cubrir los ojos y se las llevaron—a esas tres y las dos anteriores póngalas juntas en el cuarto especial y cuidenlas bien, serán las que usaremos para la bienvenida de los nuevos integrantes del VIP

H2: Cuando será la actividad señor?

Jefe: Aún no tenemos la fecha, yo les dejaré saber. Que se bañen y le dan ropa nueva a cada una y todo lo que necesiten—enciende un cigarillo—que sientan que son nuestras invitadas especiales—se pasa el dedo por el labio inferior—a la fierecita me la traes mañana cuando esté más tranquila

H2: Si señor—sale y cierra la puerta

Jefe: Yo me encargaré de domarla a mi manera—sonrió—realmente me gustó esa fierecita.