14 ~ hwang hyunjin ~

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— Buenos días —saludé con diversión cuando los primeros chicos entraron a la cocina. Felix, Seungmin e Innie frotando sus ojos, saludaron con un movimiento de cabeza— Sientense, ya casi está el desayuno.

— ¿Qué es ese olor? —Changbin, quien venía detrás de ellos con los ojos cerrados, los abrió como platos cuando el olor de los panqueques llegó a su nariz— ¿Son panqueques?

Reí ante su pronunciación de la palabra, volviendo mi mirada a la sartén donde me encontraba preparandolos. Con ayuda de una espátula deposité el último de ellos en un plato y lo dejé sobre la mesa. Tomé el dulce de leche que mantenía junto a mí en la cocina y también lo dejé en la mesa, junto a unas cuantas cucharas.

— ¿Y el resto? —pregunté cuando Bin estuvo a punto de lanzarse a la comida. Se encogió de hombros al igual que los otros dos chicos, quienes ahora se veian más despiertos— ¿Crees poder esperarlos?

— Pero tengo hambre —hizo un mohin el mayor, observando los panqueques con deseo.

— Al menos espera a que esté el café —reí alejandome de la mesa nuevamente para sacar la cafetera de su estación. Esta, que era más grande que una normal, contenía la medida justa para todos los miembros de la casa— Vengan a buscar sus tazas, vamos.

Y como era costumbre los fines de semana, la otra parte del grupo apareció con nuestro lider detras de ellos, quien se aseguraba de levantar a los chicos al mismo tiempo para que pudieramos desayunar juntos. Como durante la semana teniamos horarios tan complicados y muchas veces no coincidiamos, los sabados y domingos estaban reservados para (al menos) desayunar juntos.

Con las tazas desplegadas sobre la mesada, cada miembro tomo la suya y virtió ya sea la leche o la crema de su preferencia. Conociendo sus gustos, ya había servido el café que cada uno tomaba en sus tazas, solo quedaba que lo terminaran ellos.

— Buenos dias —se acercó Jinnie, el anteultimo en llegar, y envolvió mi cintura con una de sus manos ya que en la otra mantenía su taza llena— Y gracias —sonrió de lado, señalando la bebida en su mano con un movimiento de cabeza.

— Buenos días a ti también —acepté el beso que dejó en mi frente con una sonrisa, pasando ahora mi brazo por sobre su cintura y recostando levemente mi cabeza en su pecho— ¿Está bien el café?

— Delicioso como siempre —sonrió uniendo nuestras miradas— ¿Y el tuyo?

Señalé la mesa con un movimiento de cabeza, hacia el que era mi lugar, sobre la cual se encontraba mi taza humeante. Tirando de mi, Jinnie me llevó hasta mi silla y se sentó a mi lado, tirando de esta para acercarme más a el.

— ¿Qué vamos a hacer hoy? —pregunté mientras sentía el brazo libre del mayor pasar por detras de mi cintura. Se depositó en mi costado y la dejó ahi mientras sorbia de su café.

— Toca gimnasio hoy —sonrió Binnie levantando la manga de su camiseta y flexionando su brazo— Estos bebés no se mantienen solos.

— Que bueno que puedas asumir que son bebés todavía, Bin —palmeó su hombro Lino con una sonrisa divertida, riendo ante la expresión indignada del menor.

— ¿Entonces los tuyos no nacieron aún, Lino? —preguntó Seungmin escondiendo su sonrisa detrás de su taza de café. Esquivando un proyectil de papel de cocina que su mayor le lanzó, rió dejando la taza en la mesa— ¡Ya, ya! Lo siento —levantó sus manos en señal de rendición, manteniendo la sonrisa.

— Así tienes que tenerlos, Leah —me indicó Minho con un asomo de sonrisa— Presta atención para cuando te consigas algún dongsaeng —resaltó mientras asentía.

stray kids one shot's ✧︎ִֶָ ̽ Where stories live. Discover now