VI

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Yuta miraba asombrado a Gojo por el plan que había creado. La desesperación lograba hacer grandes cosas en las personas, pero para Gojo podría ser algo que le jugara en contra.

-Si descubren que si quiera pensamos robas una esclava de la residencia de Itadori, su gente se pondrá en contra suya, señor.

Las advertencias de Yuta no podrían importarles menos, él solo pensaba en su amaba Yume, viva o enferma, desesperada por su ayuda para lograr sobrevivir de las garras de Jin.

-¿Qué pasara con Itadori Yuuji?

La pregunta lo sobresalto.

Observo durante unos segundos a Yuta sin decir una palabra.

-Lo haré parte de mi grupo de concubinas.

Yuta se quedo mudo, juzgándolo solo con la mirada.

-Adelante. Dilo-se aventuro Gojo sabiendo lo que vendría.

-¿Crees que él acepte? ¿O al menos que Yume lo haga? El hijo del hombre que la secuestro y torturo será una de tus concubinas, ¿ese es tu plan por seguir?

Gojo se refregó los irritados ojos por tanto trabajo que ha estado haciendo desde la partida de Yuuji a su residencia.

Claro que lo había pensado, una y otra vez. No estaba preocupado por Yume, era Yuuji quien no dejaba tranquila su mente.

-Yume esta al tanto de la habitación roja del rey. Ella aceptara.

-Eso crees tú.

-Lo creo-dijo con convicción-. Conozco a Yume y no le importara que tengo una concubina.

-Es el hijo de Itadori Jin, Gojo-trato de razonar Yuta-. Es muy probable, no, la verdad es que lo aseguro. Si regresa Yume es muy probable que tenga algún trauma de su experiencia con Jin, ¿qué crees que le traerá Yuuji al verlo? De solo escuchar su nombre ella podrá tener un ataque.

-Crees que no lo sé.

-¿Qué crees que le pasara cuando se entere que es tu única concubina?

-Estas armando un escandalo por algo muy pequeño, Yuta.

-Tienes que pensar todas las posibilidades.

-Todavía no sé si Yuuji aceptara mi propuesta.

Yuta suspiro agotado por la constante preocupación de su mejor amigo, no era común ver al gran Gojo Satoru nervioso y alterado, todo lo contrarió. Al estar al lado de Yume era un hombre feliz, despreocupado y confiable ante sus seguidores, trasmita paz y armonía, en cambio ahora su espíritu estaba cansado y agotado de solo estar lejos de la mujer que ama, sus decisiones ante el reino han sido dudosas y cuestionables por algunos súbditos.

-¿Por qué deseas tanto que Yuuji se quede a tu lado?

Aquella pregunta lo ha estado rondando por unos días, Gojo no era de las personas que se encariñan de inmediato, mucho menos de las que sienten lastima por otros. Itadori Yuuji debía poseer algo que haya dejado al príncipe encandilado para recibir su preocupación.

-Él es otra victima de Jin.

-¿Qué tan seguro estas de eso?

-Lo puedo notar-dijo de manera brusca al notar como Yuta sugería una traición de parte de Yuuji-. He hablado con él durante mucho tiempo, se como piensa y se como es su personalidad. No seria capaz de lastimar a alguien.

Gojo zanjo el tema volviendo a repasar el plan para el rescate de Kutatsu Yume en la residencia Itadori. Un plan bastante común con una estrategia muy riesgosa para ambos, siendo los únicos al tanto del secuestro de Yume. Solo estaban ellos para su rescate, si llegaban a fallar o incluso ser descubiertos era muy probable una inminente guerra entre el reino del norte y sur. Miles de vidas serian cobradas por la ambición de Jin y la desesperación de Satoru.

AFECTO - JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora