Capítulo 10 : Necesitamos hablar sobre Jun Wu

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ADVERTENCIA

- autolesiones menores

Después de obtener algo de alimento en su sistema, y ​​con las disputas perpetuas de sus amigos como telón de fondo familiar, Xie Lian finalmente logró lograr una especie de calma en medio de circunstancias tan extrañas. Se frotó los ojos y esperó que el leve enrojecimiento que venía con las lágrimas ya no fuera visible.

Estaba excesivamente avergonzado de haber sido visto llorando.

¿Estaba tan desesperado por la compasión que la mera insinuación de eso volvía tonto a su cerebro? ¿Lo frotó en carne viva y dejó los restos tiernos para que alguien los calmara?

No, no fue eso. no puede ser De lo contrario, habría recibido con los brazos abiertos el toque gélido de Bai Wuxiang.

Al menos su cabeza ya no le dolía tanto. El latido ineludible se había reducido a un mero dolor, olvidable en el recuerdo de un dolor mucho peor.

Probablemente gracias a Mu Qing. Tenía razón, Xie Lian nunca bebía suficiente agua.

"Bueno", gimió Feng Xin mientras se quitaba el dedo índice de la sien. "Eso fue un fracaso. Ling Wen dijo que aún no ha encontrado nada más, pero que todavía hay mucho por revisar, así que..."

Mu Qing puso los ojos en blanco. "Que es exactamente lo que te dije que diría".

"¡¿Oh, sí, porque siempre tienes razón?!"

"¡Más de lo que tú la tienes!"

Mientras los dos continuaban discutiendo, Xie Lian miró a su lado para ver a Hua Cheng jugando ociosamente con sus palillos. Tejía las finas piezas de madera entre los dedos delgados, presionando distraídamente las puntas contra la palma de la mano y, a veces, la yema del pulgar.

Xie Lian había sentido la fuerza firme debajo de esas manos suaves cuando se posaron contra su espalda, y podía verlo ahora en la forma en que el agarre perezoso de Hua Cheng no podía ocultar los callos nacidos de años de empuñar una espada.

Las manos de un soldado.

Hermoso.

En el tercer dedo de su mano derecha había un hilo rojo, una coincidencia completa con el que Xie Lian había encontrado atado alrededor de su propio dedo. Se sentó de manera diferente contra la piel de Hua Cheng, vibrante y correcto , como si no fuera una cosa separada sino una extensión de sí mismo.

Hua Cheng inclinó la cabeza para encontrarse con la mirada de Xie Lian, ese único ojo brillante brillaba con alegría. Xie Lian estaba mortificado de ser atrapado mirando fijamente y rápidamente desvió la mirada.

"¿Tiene Su Alteza algún pensamiento que le gustaría compartir?" Hua Cheng preguntó, con una sonrisa en sus labios.

"Yo..." Las mejillas de Xie Lian se sonrojaron por una razón que no pudo determinar. Ignoró el calor que se acumulaba bajo su piel y buscó lo correcto para decir. Mu Qing y Feng Xin se habían quedado en silencio, mirándolo expectantes, y de repente a Xie Lian se le ocurrió que la persona con la que se habían puesto en contacto era Ling Wen... pero ¿qué hay de... "¿No deberíamos hablar con Jun Wu?"

Los ojos de Feng Xin se abrieron de par en par y compartió una mirada preocupada con Mu Qing.

"Sé que antes dije que no iría a los cielos, pero el Emperador Marcial Celestial debe poder ayudar..." Xie Lian buscó en el interior de su boca esa herida leve que no podía dejar de molestar. Probablemente se había curado. A menos que todavía esté molesto conmigo. Pero han pasado cientos de años, ¿verdad? ¿Qué tan enojado puede estar?"

Cuando Era Mayor (When i Was Older) TGCF [COMPLETO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora