Te amare aunque seas un desastre

Capitulo 1: La presión de ser perfecta

La resaca me estaba matando

sentía que la cabeza me explotaría en cualquier momento

me dolía abrir lo ojos y tratar de mirar la luz que atravesaba mi ventana

--Carajo --me queje mientras cubría mi rostro con la sábana de mi cama-- No vuelvo a tomar en mi vida

Creo que todos hemos pasado por la etapa de la resaca, en donde juras no volver a tomar ni una sola gota de alcohol en toda tu vida, pero a la noche siguiente estás reunida/o de nuevo con tus amigos en el mismo bar de siempre tomando de nuevo

--Sera mejor que te levantes de esa cama antes de que mamá despierte -ecuche hablar a Beca, mi hermana mayor

Con ambas manos quite la sábana que cubría mi rostro y trate de abrir los ojos

--Que haces aquí -pregunte

--Te traje un poco de pan tostado, jugo de naranja y las pastillas para aliviar la resaca -contesto

--¿Qué hora es?

--Son las 8 de la mañana -dijo mientras miraba su reloj de muñeca

--¡Mierda! -grite al mismo tiempo que me levantaba de la cama de un salto- Llegó tarde al instituto

--Relajate un poco Vega -se cruzo de brazos mientras me veía correr de un lado a otro

--Como quieres que me relaje si seguramente recibiré un reporte por llegar tarde -bufe antes de entrar al baño

Mi instituto es realmente estricto

Si llegas unos minutos tarde a cualquiera de tus clases es seguro que recibirás un reporte y te mandarán a dirección

Si asistes a clases con una falda que no pertenezca al uniforme escolar sin duda irás a parar a detención

Si asistes al instituto con un celular seguramente te lo quitarán y no te lo regresarán hasta que el año escolar terminé

No puedes tener novio/a dentro del instituto pues eso te distraerá de tus obligaciones y tu futuro se verá afectado

No puedes teñirte el cabello y mucho menos cortarlo por encima de los hombros

Estar en ese instituto debe sentirse exactamente igual que estar dentro de prisión

--¿Eres idiota o te haces Vega? -cuestiono mi hermana

--¡No se de que estás hablando! -grite desde el baño

--Parece que alguien se olvidó de que hoy es sábado

En cuanto escuché las palabras de mi hermana abrí la puerta del baño y salí con la falda sin acomodar y con el cabello a medio proceso de peinado

--Es broma verdad -la mire seriamente

--No -respondio con la misma seriedad -Vega, hoy es sábado

Sin decir ni una sola palabra camine hacia mi cama arrastrando los pies y me lancé sobre ella cayendo boca abajo rendida y sintiéndome una completa estúpida

¿Cómo demonios pude olvidar que hoy era sábado?

--Sera mejor que comas lo que te traje -comentó Beca