Archivos Secretos

Archivos Secretos - 6 -

Capítulo 6

Una extraña aparición

A la mañana siguiente cuando John despertó se preparó un café y se alisto para salir con Sarah, subió las escaleras para el piso de arriba donde ella se encontraba, pero al parecer ya no estaba, esto le parecían un poco extraño, se preguntaba en su mente que él lo que le habrá ocurrido, acaso se pudo haber olvidado de él, meneo la cabeza de un lado a otro para quitarse ese pensamiento de su mente y bajo hasta la recepción

- Señor William, no sabrá algo de Sarah -

- Si de hecho estaba a punto de sumir para avisarte, ella salió como a las 6 am y me dijo que te diera esto, si quieres revisarlo por ti mismo está bien, solo déjame te digo que soy muy respetuosos con las cosas de otros así que no la he abierto, ya cuando me la dio estaba entreabierta -

- Entiendo, no se preocupe, espero no le moleste el sentarme aquí para leerla -

- Adelante no es molestia -

Hola Johnilu, perdón la formalidad y la letra en sí pero no me creerías si te dijera que esto lo estoy escribiendo a las tres de la mañana con un ojo abierto y el otro cerrado, pero en fin, me gustaria ser breve e ir al grano pero a este paso creo ya empecé mal, como ya abras notaste tengo trabajo, y de hecho aparte de ese trabajo tenía otro al cual renuncie ya hace varios años, este consistía en robar pruebas de sangre del laboratorio de Shinelane que se encuentra en el este, cuando me harte de aquella vida tuve que prometerles a esa gente que si algún día llegaba a delatarlos les tendría que pagar una gran cantidad de dinero, pero eso es algo de lo que me arrepiento, ya que un día la policía estaba buscando a los culpables de aquellos robos, lo intente pero se me escaparon varias pistas que llevaron a la captura de estos individuos, ellos fueron encerrados pero varios meses después su fianza fue pagada con sobornos al departamento de policía, hace un día me llegó un correo el cual me advertía que tenía que pagar medio millón de dólares o si no asesinarían a toda la gente que me rodea incluyéndote a ti, no contare más detalles, solo que tengo que escapar de este lugar y te pido de favor que te cuides y que nunca se te olvide que nunca le debes de dar la espalda a la gente de este pueblo, gracias por todo hermoso y si sigues mis consejos pude que nos volvamos a ver pronto... adiós

- Seños William donde está la estación de autobuses más cercana -

- Saliendo de aquí una cuadra derecha, dos a la izquierda y tres a la derecha -

- Gracias, me tengo que ir adiós -

- Si suerte y recuerda nunca le des la espalda a la gente de este pueblo -

John corrió a máxima velocidad y al llegar un nuevo autobús estaba llegando recién con destino a StarLake, un lugar parecido a ShineLane que se encuentra a 2 horas de ahí que es un lugar muy recurrido por la gente ya que tiene lagos preciosos y paisajes y vistas hermosas, John lo tomo sin dudar y se sentó en el asiento de hasta atrás el cual era su favorito debido a que nadie presta atención a dicho lugar, ya llevaba media hora de viaje y aun no salían de ShineLane, razón por la que John se empezó a porque la gente le llamaba pueblo si parecía inmenso, se levantó de su mediado sueño y noto que se encontraba en un embotellamiento casi a las afueras de ShineLane, le dijo al conductor que se iba a bajar y le pago lo debido, la salida del pueblo estaba bloqueada por policías, razón que por lógica en realidad el problema no está delante sino detrás de ellos, camino para atrás y atreves de las ventanas de los autos la gente se veía confundida porque al parecer nadie sabía lo que estaba pasando, John volvió a subir al autobús debido a que no había lugar a donde ir y ya en el decidido echarse una merecida siesta

Horas más tarde ya había oscurecido y frente a John había una chica mirándole fijamente como si tuviera una obsesión, el apenas abrió un ojo dio un brinco de su asiento que hizo que se despertara de forma inmediata

- Quien eres tú, y cuanto tiempo llevas mirándome -

- Me llamo Vociel Lee, pero la gente por alguna extraña razón me dice Tyra, precioso... digo tu cómo te llamas -

- Me llamo John Stratford, pero ya en serio cuanto llevas mirándome, me perturbas -

- Una hora aproximadamente, digo 3 minutos... de dónde eres -

- Eso que acabas de decir fue muy extraño... vengo de ShineLane del oeste, recientemente me mude a los departamentos y ahorita estoy buscando a una amiga mía, la has visto -

- Tendrías que platicarme más acerca de ella, pero no preguntaras de dónde vengo -

- Si supongo, dime de dónde eres -

- Soy de ShineLane, aunque no pertenezco a un pueblo en específico ya que tengo una casa en cada parte del lugar, no creas que son casas de lujo de hecho fueron armadas por mí, algunas son de madera y otras están en los árboles, pero me gusta mi vida y puedo decir que me siento cómoda -

- Interesante, bien entonces supongo nos volveremos a ver después, me tengo que ir ahorita porque no tengo tiempo, tengo que ir a buscar a mi amiga -

- Esta bien, pero podrías decirme al menos su nombre, puede que la encuentre primero que tú y te avise -

- Muy amable de tu parte, se llama Sarah Scotland -

- Bien te ayudare, puedes irte y recuerda nunca le des la espalda a la gente de este pueblo -

- Muchas gracias Vociel, nos veremos pronto... o eso espero, hasta entonces -

John salió del camión a toda prisa y se decidió por buscar a Sarah no sin antes notar que Vociel ya no se encontraba en el asiento donde estaba, esto le incomodo un poco pero a la vez no le tomo mucha importancia, recordó que ella vivía en varias casas alrededor del pueblo, alguna de madera y otras en los arboles pero había una pequeña posibilidad de que estuviera mintiendo ya que nunca había visto una casa similar a la descripción que dio, a los pocos minutos atrás fuera del embotellamiento había varios vehículos de policía, como ya era de noche todos y cada uno traían sus luces a tope y sirenas encendidas haciendo un escándalo por la calle, había varios agentes vestidos de negro con gabardinas hasta las rodillas, de entre todos ellos destacaba unos que traía una alargada pipa y soltaba aros gigantes de humo, John se acercó sigilosamente y el detective fue el primero que noto su presencia, se alejó un poco donde había oscuridad y ahí estaban los dos

- Veo que noto que alguien estaba aquí, la próxima vez seré más cuidadoso -

- No hay problema chico, soy muy considerado con los de tu edad, me agradan los jóvenes, dime muchacho cuál es tu nombre -

- Me llamo John Stratford, dígame con quién tengo el gusto -

- Soy el detective Peter Anderson y en este preciso momento estamos investigando el caso de una chica que fue asesinada al parecer hace unas horas, no sabe quién es ni quien fue el responsable -

- Suena interesante, dígame algo podría ver a la chica, trabajo en la biblioteca y recién llegue a este pueblo he salido mucho, para ser exacto todo el día estoy fuera de mi estancia, he visto muchas caras y se normalmente a donde se dirigen, talvez pueda serle de utilidad señor Anderson -

- Chico no hay necesidad de tanta formalidad, llámame Peter y respecto a los que dijiste nos sería de gran ayuda si pudieras identificar quien es esta persona -

- Claro hare todo lo posible -