Taehyung fue despertando poco a poco, y vio que Jungkook se encontraba completamente dormido a su lado. Se incorporó asustado, recordaba prácticamente todo lo que había pasado, y los huecos que quedaban, no eran muy complejos de descifrar; era consciente de lo que había pasado debido al evidente contexto. Jungkook estaba sumido en un profundo sueño, y su rostro parecía tan...pacífico, y se sintió demasiado feliz. Se acomodó de lado y comenzó a acariciarle la cara, y quitarle algunos mechones de cabello de la frente. Luego, se hizo hacia adelante y se acurrucó en su pecho, esperando darle más tranquilidad aún. Unos minutos pasaron, hasta que Jungkook despertó, y miró hacia Tae, que se dio cuenta del movimiento y lo miró a los ojos; para luego bajar la mirada, avergonzado. Si bien, había querido que ese día llegara hace mucho, le daba vergüenza mirarlo a los ojos, ya que había dicho cosas demasiado subidas de tono. Jungkook se dio cuenta de esto, y con toda la confianza que tenía le levantó la barbilla y le dio un breve beso.
- Hacía tanto que no dormía tan bien... - Susurró Jungkook aún algo adormilado; y era verdad. Sin pesadillas ni insomnio... se sentía como una persona nueva, además de claro, todo lo que había ocurrido antes. – Y anoche... fue espectacular. – Taehyung, aunque sonrojado, se limitó a sonreírle seductoramente.
- Debo darte crédito... creo que nunca me había sentido así de bien. – Ahora era Jungkook el sonrojado.
- ¿Estás bien? ¿Adolorido? – Taehyung lo abrazó.
- Adolorido en el buen sentido... me hace ver que esto no fue un sueño. –
- ¿Qué clase de sueños tienes? – Tae rio. – Debería prepararte algo para comer. –
- ¿Sabes cocinar? –
- Hay cosas que no sabes de mí... - Jungkook se sentó, decidido a irse, pero Tae se aferró a su espalda como si de un koala se tratara.
- ¿Me vas a dejar aquí? – Jungkook sonrió.
- Quiero hacerte un desayuno... -
- No es necesario. Quédate en la cama más tiempo conmigo. –
- No quiero que algo te vaya a pasar por no comer. –
- No me pasará nada...y solo será un rato más. –
- Tú quédate aquí... tampoco tardaré. - Tae besó el cuello del muchacho con delicadeza unas cuantas veces.
- Dime que estás aquí en serio. – Jungkook se giró hacia él y le dio un beso en los labios.
- En serio estoy aquí... Ahora sé bueno y quédate aquí. – No fue mucho tiempo el que tuvo que esperar, hasta que Jungkook le llevo a la cama un enorme desayuno, que parecía casi para 10 personas. Tae comió y de paso, le invitó de lo que él mismo había preparado, y aunque al principio no quería aceptar, la mirada insistente de Tae lo convenció.
- ¿Cómo supiste? – Dijo Tae mientras comía uno de los panes que le había puesto en la bandeja.
- ¿Qué? –
- Ayer. Que ese chico... trataría de... - Jungkook agachó la mirada.
- Es parte de mis compañeros, aunque no es mi amigo. –
- ¿Te lo contó? –
- No... hizo un trato con uno de mis amigos, y él... tuvo que conseguir la droga... Pero le entregó una foto tuya. Me di cuenta algo tarde. –
- Puedo protegerme solo... deja de preocuparte. – Jungkook hizo una mueca y recordó aquellos videos. No sabía cómo decirle que sabía acerca de ellos, así que se limitó a asentir con la cabeza. – Pero gracias por haber venido...-
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¿SUPERando el amor? | TAEKOOK
RomansaTras ser abandonado por su madre, en un internado especializado en el uso de súper poderes, Jeon Jungkook, comienza a ver las dificultades de la vida y la maldad que existe dentro de las personas, ya sea cegadas por el miedo, por la envidia o por el...