19. Draco Malfoy

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La habitación de colores esmeralda se encontraba sumida en un total silencio y en una oscuridad casi total. Lorelei se encontraba sentada en la orilla de la única cama de aquella habitación, perdida en sus pensamientos y mirando hacia el suelo como si este le brindará la mejor distracción para su espera.

La rubia prentendia tener una seria conversación con su actual pareja, con quien mantenía una relación secreta de un año. Ella estaba cansada de la situación en la que se encontraba, sabia que no le sería fácil el que su padre aceptase su relación con el platinado ya que este no le caía para nada bien, también sabia de lo elitista que era la familia de su pareja y que ellos no aceptarían fácilmente el que ella fuese una mestiza, pero había una situación en especial que la mantenía molesta y era el descarado coqueteo de las chichas hacia su pareja, aunque no las culpaba en realidad ella sabía que el era alguien muy atractivo, lo que le molestaba, era que el les siguiera sus coqueteos, no le gustaba para nada el poco respeto que le tenía para hacerlo frente ella.

Al escuchar la manija de la puerta y el rechinar de esta se enderezó en su lugar y miro hacia la entrada, topándose con aquel joven, quien tenía su rostro en un estado sereno y que al mirarla cambió a uno de aparente felicidad. Cerró la puerta a su espalda y caminó hacia ella.

-Cariño, ¿Que haces aquí tan tarde?- pregunto mientras tomaba asiento a su lado.

-Necesito hablar contigo Draco- dijo con su semblante aún serio.

-¿No puede esperar?, ya es muy tarde linda mejor hay que dormir y por la mañana hablamos- propuso el joven tomándola de las manos. Lorelei negó con su cabeza a la vez que retiraba sus manos de las de el.

-No puede esperar más Draco, desde hace tiempo he querido decirte esto pero tú siempre lo pospones, ya no más- dijo poniéndose de pie frente a el.

-Esta bien, ¿Que es lo que quieres decirme? - accedió intentado tomarla por la cintura, pero ella se alejó y eso lo confundió.

-Dime Draco, ¿En verdad esto, lo que sea que tenemos tú y yo, para ti es algo serio y no solo un pasatiempo o algún tipo de diversión?- pregunto la rubia con su ceño fruncido.

-Claro que lo es, ¿Por que llegarías a pensar lo contrario?- pregunto parándose de igual manera.

-¡Como te atreves a si quiera preguntar!- exclamo pasando sus manos por su cabello -Te has dado de cuenta de que siempre cualquier mínima interacción que tenemos es en secreto y es cansado Malfoy-

-Ya sabes el porque es así querida- dijo queriendo acercarse a ella pero nuevamente se alejó.

-No solo es eso Malfoy- dijo negando con su cabeza -Eres un coqueto de primera y no te parece interesar el hecho de que tienes novia, a ti te parece lindo coquetear con tantas chichas en mi cara, ¡Vamos dímelo, quiero saber!-

-No me gusta hacerlo Lorelei- negó apenado.

-¡Pues no parece!- exclamó furiosa -Ahora dime ¿A ti te gustaría que te hiciera lo mismo?, ¿Te gustaría que yo responda al coqueteo de los chichos que se me acercan?- pregunto mirándolo directamente.

-Carajo, claro que no- respondió con su ceño fruncido y negando con su cabeza.

-¿Entonces por tu si lo haces?- contraataco con decepción pura plasmada en su rostro -Estoy en verdad cansada de tus acciones, estoy cansada de que no me des mi lugar y que seas un cobarde de mierda para no ir con tus padres y decirles que tienes a una novia mestiza, o que vayas con mi padre y le digas que en realidad si me amas y que no le importa si el te acepta o no- reclamo con sus ojos cristalinos.

-Cariño yo-

-Cariño nada Malfoy, te diré algo, mi padre ya sabe de nosotros y no me reprocho pero no te aprobó por el simple hecho de mantenerme en secreto, dijo que su princesa no merecía ser un secreto, ¿y sabes? Yo también pienso lo mismo- dijo limpiando las lágrimas rebeldes que había derramado -Así que no creo que lo nuestro pueda funcionar más- finalizó cruzando sus brazos sobre su pecho.

-Vamos Lorelei no puedes hacer esto, iré a hablar con mis padres y el tuyo si eso es lo que quieres, también dejaré de coquetear con las chicas, pero por favor no me dejes- suplico con su rostro enrojecido hasta las orejas.

-Yo quería que lo hicieras por voluntad propia, que vieras el daño de tus actos y no solo porque yo te reclame- dijo negando con su cabeza -Esto solo me hacer ver que en realidad nunca íbamos a funcionar- concluyó ahora si mientras caminaba a hacia la salida de la habitación.

-¡Lorelei vuelve acá!, ¡No me puedes hacer esto carajo!- gritó al ya no tenerla en su campo de visión, pero no la siguió y la dejo irse.



sensazxi0n

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