«Desastre»

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¿Por qué todo debe ser ordenado?

Hay una satisfacción; en el caos de tus emociones‚ cuando arrancas esa máscara de falsedad y te plantas como realmente eres.

Cuando tu cabello‚ adopta lo salvaje de tu genio y se vuelve aún más manejable‚ enrrollado en mis manos.
Cuando tus labios están increíblemente rojos y me hacen desear comprarte fresas‚ solo para ver cómo las pones entre ellos; jugando a diferenciar entre su tono y el tuyo.
O cuando tu tez es tan increíblemente blanca‚ como haz de luz‚ que proyecta la luna; en tu cuerpo tendido en la cama.

Tus ojos se iluminan con hambre de correr‚ y yo persigo esa iluminación como una polilla.

Soy adicto a tu llama‚ a tu caos; a tu desorden.

Al sabor de miel que dejas en mi boca y a tu olor como tormenta en plena primavera.
A la magnífica grandilocuencia de tus palabras y al acto tan placentero‚ de ver tus ojos entrecerrados; en la placidez de tu sueño.

No te quiero perfecta‚ te quiero única‚ desastrosa e indomable.
Te quiero con tu espíritu ardiendo y la brasa de tu alma como un faro.

Quiero ser abrasado por esa luz‚ como también quiero ser abrazado por tu cuerpo‚ todas las noches que nos queden; y todos los amaneceres que el astro nos permita contemplar.

Huellas de un Chico en GuerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora