El Diablo Se Viste De Colunga - Adaptación.

Capítulo 11

Sería imposible trabajar con alguien con menos ganas de divertirse.

Con Fernando todo se reducía a trabajó... después de pasar otra noche en vela .

No sólo era Rachel la que le quitaba el sueño, sinó también el incidente con Fernando.Ella no había intentado coquetear con él, se repetía indignadamente una y otra vez en la cama .

- ¿O quizá si ?-.

Le ardían las mejillas al recordar el gesto, aparentemente inocente, y los cálidos dedos de Fernando en su nuca .

Había llegado temprano al trabajo, pero Fernando se le había vuelto a adelantar.Ni siquiera la miró cuando le llevó el café al despacho y se limitó a preguntarle por algunos expedientes y a recordarle que quería empezar las entrevistas a las nueve. Viéndolo tan impasible, Lucero se reprendió por la noche anterior que paso dando vueltas en la cama.

Lucero añoraba los días en los que charlaba alegremente con Alesksi junto a la máquina del café.Incluso con Kate ,se respiraba un ambiente mucho más relajado.Con Fernando en cambio,todo era trabajo, trabajo y nada más que trabajo.

El descanso para almorzar consistía em una rápida carrera a la máquina expendedora y otra bebida energética.

-Annika está al teléfono - le dijo a Fernando cuando él no atendió la llamada de su hermana. - Quiere hablar contigo-.

- Estoy ocupado con las entrevistas.¿Quién es el siguiente?- preguntó él, mirando ambos con la ceja arqueada la bebida que portaba Lucero. Era la tercera que se tomaba aquel día.

-Debería ser Alannah ,la responsable de ventas al por menor, pero todavía estoy intentando localizarla 

-¿Y? -

- ¿!Y!? - Es una infeliz que se queja por todo y que cree que el mundo está en su contra... - dejó de hablar y Fernando levantó la mirada . Lucero tenía los ojos cerrados y el rostro pálido.

- ¿Vas a desmayarte?-

-No - respondió con una voz débil -.Es solo ...- respiro profundamente para sofocar las náuseas y se lamió los labios resecos -.

- Anoche no dormí - vió que Fernando apretaba la mandíbula -Ya sé que no es tu problema.Es sólo mío .

Se sentó en el sofá y apoyó la cabeza en las rodillas . Él permaneció sentado trás lá mesa , observándola, ni sorprendido ni preocupado .En todo caso aburrido por todo el drama que estaba presenciando .

-Me pondré bien - le aseguró Lucero al cabo de unos segundos.

Pero no fue así .

Al salir del despacho empezó a darle vuelta la cabeza .Se bebió una botella de agua , engulló cuatro gomitas y una bolsa de papas fritas que escondia en el cajón y recibió una llamada de Alannah.

-Viene para acá-  le informo a Fernando por el interfono _. Tenían un cliente muy importante - un fuerte zumbido le impidió oír su respuesta.

Cuando Alannah no se presentó y Lucero no respondió el interfono, Fernando salió del despacho y volvió a encontrársela con la cabeza apoyada en la mesa .

-No estoy durmiendo - le aclaró ella sin moverse - Y de verdad que lo siento -.Tenía que decírselo, no todo , pero sí una parte de la verdad .O eso o la podría de patitas en la calle.- Tengo algunos problemas personales.Este fin de semana apenas si he pegado el ojo y a noche tampoco pude dormir.

Levantó la cabeza y Fernando deseo que volviera a agacharla , porque su aspecto era lamentable .Tenía los labios descoloridos y el maquillaje le corría por las mejillas. Fernando estaba acostumbrado a que su personal lo solucionará todo con solo chasquear los dedos, pero allí no había nadie más.

Fue al baño del despacho, mojó una toalla y se la llevó a Lucero .Su historia no lo convencía mucho , peto era evidente que se encontraba mal .Ella acepto la toalla con una media sonrisa y se la pegó a la cara  unos instantes.

- Mañana estaré mejor - declaró al apartarse la toalla para respirar - Todo volverá a la normalidad.

- Le diré a mi chófer que te llevé a casa ... empezó a decir Fernando, pero se detuvo al ver su mueca .La idea de caminar y subirse al coche debía haberla mareado de nuevo - . Tienes que descansar.

No comprendía que le pasaba, pero no dudó.

La llevó al que había sido su viejo despacho, antes de que Fernando insistiera en el ascenso , se detuvo a admirarla , y Lucero se dejó caer con alivio en los familiares cojines.

- Lo siento mucho, de verdad - murmuró.El color volvía a sus mejillas ,pero su maquillaje se había quedado en la toalla - Puedo explicártelo...

-Ahora limítate a descansar- la cortó él. Al  ver que estaba temblando se quitó la chaqueta para arroparla  y bajo las persianas. Cuando acabó, ella ya se había quedado dormida.

Llamó a recepción y pidió que subiera alguien a sustituirla el resto de la tarde, mientras él seguía entrevistando al personal. Alannah resultó efectivamente una infeliz que se quejaba por todo ,tal y como le había dicho Lucero.

Era un experto entrevistador y aprendió mucho escuchando como los empleados intentaban salvar su pellejo culpando a otros .Sus sospechas se vieron confirmadas .Los problemas de la empresa habían empezado mucho antes de la muerte de  Iván , su padre.

Tuvo que escuchar eso, si un montón de veces,y cosas carentes de interés ,quizás era la fachada para ocultar su dolor y conseguir la información deseada . Y aún faltaba algo más .

Todo el mundo sabía que Lucero estuvo acostándose con Alesksi y seguramente con Levander ,según le dijeron  , Lucero siempre habla mantenido un íntimo contacto con el jefe.

Fernando consiguió mantener el rostro impasible mientras lo escuchaba repetidas veces que hasta la cabeza parecía explotarle del dolor , pero por dentro se sentía profundamente contrariado de que aquella sonrisa que empezaba a gustarle, aquella refrescante locuacidad , aquella irrefrenable tendencia a las bromas , el hablar sin dejar de moverse y esa mirada,todo aquello que era Lucero,no solo le gustaba a él .

En un descanso de las entrevistas, Fernando fue al despacho y la observó durante un minuto. Dormía plácidamente, y su rostro relajado  y desprovisto de maquillaje era aún más joven , más hermoso,más angelical, casi inocente...

Encontró su expediente y lo examinó a fondo.En várias ocasiones la habían llamado de Recursos Humanos, siempre a petición de algún otro colega ,e inclusive Kate se había quejado un par de veces. Pero nunca se habían tomado medidas de ningún tipo contra ella .

Y Fernando estaba seguro de cuál era la razón.

A las cinco en punto,  Lucero entró en el despacho, con la mitad del rostro enrojecido por el cojín .

-! No sé que decir! - le tendió la chaqueta que él acepto sin decir nada -Pero gracias.Te veré mañana, suponiendo que aún conservé el empleo..- intentó adoptar un tono bromista, pero le temblaba ligeramente la voz .

-¿Acaso quieres esté empleo?- le pregunto Fernando

-Pues claro - respondió casi de inmediato.Lo necesitaba más que nunca.

- En éste caso,¿Puedo surguerirte que vayas a casa y  descanses ? ¿Y que comas algo en lugar de atiborrarte de cafeína? - no sabía por qué, pero aquella mujer lo sacaba de sus casillas . Estaba demasiado pálida y quizás delgada y no se preocupaba nada por su salud.- Vamos a por algo de comer .

Lucero negó con la cabeza.Era cierto que se moría de hambre, pero la idea de pasar la  tarde con Fernando lejos de la empresa la puso inmediatamente en alerta.La advertencia de Fernando se le había quedado grabada y no estaba dispuesta a tontear con él.

- Hoy no tengo cuerpo para ir a un restaurante elegante... Y mañana tenemos que ir a cenar con el rey .Lo único que quiero es irme a casa, dame un baño y meterme a la cama.

- Perfecto, pero antes de eso vas a comer -Y también yo , decidió Fernando ,pues no confiaba en que fuera a alimentarse  .