Parte 1

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Al llegar a su clase, Jisung se sentó en su lugar de siempre, pero lo que no sabía, era que ese día la profesora decidiría cambiar de puestos y así quedó a lado de la persona que le gustaba.









No era novedad, todos sabían la atracción mutua que se tenían entre Minho y Jisung, menos ellos dos. Se habían gustado desde hace aproximadamente 2 años y se encontraban en su último curso antes de entrar a la universidad. A pesar de todas las miradas que se daban, nunca se dijeron lo que sentían el uno por el otro, así que Jisung pensó que ahora que se sentaría cerca de Minho, ahora sí podrían entablar una conversación y así poder ser más cercanos.

Los primeros días, fueron...raros, ninguno se decía nada, pero esos cruces de miradas y sonrisas inocentes siempre estaban ahí. Un día, a Minho se le cayó el lápiz mientras se estiraba y bostezaba al mismo tiempo, haciendo así que sus ojos se lagrimeen un poco. Al querer recoger su lápiz se percató de que Jisung ya le lo estaba pasando con una sonrisa dulce y tierna, esa que siempre lo enamoraba

-Ten, se te cayó- dijo Jisung de manera tímida y cabizbajo 

-Gracias- respondió Minho igual de tímido

-¿estás bien?- preguntó Jisung susurrando un poco preocupado

-¿Qué?- tras preguntar eso, Jisung señaló sus propios ojos- Ah, no es nada, solo bostecé estoy bien

-Ah bueno- dijo con la misma sonrisa dulce

Ese pequeño acto tocó aún más el corazón de Minho, porque para otra persona hubiera sido algo sin importancia, pero Jisung si se había percatado y eso lo conmovió.

Tras esa clase, tocó educación física, clase que Jisung odiaba con todas sus fuerzas, mientras que a Minho le encantaba, pero por una lesión en la rodilla, no podía hacer mucho que digamos. En medio del calentamiento, vio como Jisung se acercaba al profesor cojeando mientras iba apoyado de su otro compañero: Félix, quien también era uno de los mejores amigos de Jisung

Se acercó un poco solo para escuchar que había pasado

-¿Otra vez Han Jisung?

-En serio licen, lo que se me hace raro, es que siempre es el mismo tobillo el que me duele

-Ya ya, si quieres ve al aula, pero Félix tendrás que quedarte

-Pero licen- dijo Félix 

-Pero nada, aunque los conozca desde hace años, no quiere decir que les pueda consentir en todo, así que vuelve a calentar

-Pero me duele al apoyarlo, ¿Cómo voy a ir hasta el aula?

-...¡Lee Minho!- gritó el profesor 

-¿Si licen?- respondió rápidamente Minho

-Acompaña a Jisung hasta el aula, y si quieres quédate, sabes que no puedes hacer mucho esfuerzo

-Está bien- dijo con total seguridad mientras se acercaba a Jisung- ¿Nos vamos?

-...si- respondió sonrojado

Mientras se iban, sus compañeros miraban la escena enternecidos, ya que toda el aula esperaba que se hicieran novios algún día



Al llegar al aula, Jisung decidió sentarse en la silla del profesor, ya que en el escritorio de esta estaba la computadora y así podría poner algo de música.

De no ser por la melodía que sonaba de fondo, solo habría un silencio. Ninguno de los dos empezaba la conversación debido a la timidez de ambos, hasta que Lee decidió acercarse con toda la valentía que había acumulado

Mi compañero de claseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora