Capítulo 2

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Fue el viaje más largo de toda mi vida, sentí que fueron varias interminables horas, aunque posiblemente solo fueron unos minutos.


Baje del Taxi y al ver la gran casa de mis tíos me sentí un poco aliviada, pero solo un poco. Había pasado la última semana aquí pero esta vez se sentía diferente, me quedaría a vivir por lo menos unos años o toda la vida...


Mi tía Jay me abrazo y caminamos juntas hacia la puerta, cuando entramos a la casa mi tío Mark y mi primo Lou nos estaban esperando en la sala.


Al verme ambos se acercaron y me abrazaron fuertemente otras veces los abría abrazado igual pero esta vez no sentía nada parecía estar sin vida. Quería estar sin vida, quería estar con ellos.


Mi tío sonrió y hablo:

-Vamos pequeña sube a tu cuarto, necesitas descansar y tus cosas ya están en tu cuarto.


Mi tía puso su brazo sobre mis hombros y me animo a subir.

-Me a dormir, si quieres puedes desempacar mañana.


Suspire y camine hacia las escaleras.


Abrí la puerta y encendí la luz; al ver el cuarto tuve un pequeño deja vu, los muebles estaban como en mi casa pero todo lo demás estaba en cajas y maletas. Era una tortura, sentía que era una tortura. Como si quisieran que recordara lo que paso a cada momento.


Me senté en la cama pero solo me sentí aun más vacía. Me levante para apagar la luz, esperaba sentirme mejor con eso pero al darme vuelta y ver todo el cuarto oscuro no mejoro mi interior, decidí que era mejor dormir o al menos intentarlo. En ese momento sonó la puerta.

-¿Sophie?-Era mi primo Louis.

Abrí la puerta.

-¿Qué pasa?

-Nada, amm... Si necesitas algo avísame ¿Si? Estaré en mi cuarto.

-Ok.

-¿Ya te ibas a dormir?

-Sí.

-Entonces buenas noches.


Cerré la puerta y me recosté en la cama con los abrazos alrededor del cuerpo y comencé a llorar no me importo si me escuchaban o no solo quería desahogarme.


En la cocina el matrimonio Tomlinson hablaba sobre que hacer por su sobrina.

-Sophie de verdad la está pasando mal. No me gusta verla así-Comenzó Jay

-A mí tampoco, parece otra persona.

-Sí, lo sé tal vez Lou debería de presentarle a sus amigos para que el cambio de escuela no sea tan complicado.

-Tienes razón, conocer gente nueva puede ser lo que necesita.

-También nos necesita.-Mark se acercó a su esposa y la abrazo.

-Debe ser difícil para ti, era tu hermana.

-Estoy bien, me preocupa Sophie, es tan solo una niña.


Supongo que de tanto llorar me pude quedar dormida. Porque al ver el techo blanco iluminado por el Sol que entraba por la ventana me di cuenta que había superado otro día. Me levante sobre mis codos y mire a mi alrededor, los muebles vacíos junto con las miles de cajas y maletas alrededor de la cama.

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