moonlight «yoonseok»

moonlight.

Yoongi y Hoseok se habían desocupado de los pendientes que tenía cada uno. A decir verdad no eran muchos, aunque de igual forma al desocuparse de estos, decidieron tener una cita.

—Hobi, ¿Ya estás listo? —preguntó observando a su novio que arreglaba su cabello.

—Sí. Ya estoy listo, hyung -respondió y ambos se tomaron de las manos para salir de su hogar.

Fueron caminando hacia el lugar donde tendrían su cita, que sería un pequeño restaurante estilo vintage dónde mayormente se escuchaban las canciones que fueron éxitos de los años setenta hasta los dos mil. Decidieron tener una cita nocturna ya que para ambos era un poco más cómodo y además de eso sentían que terminar el día compartiendo tiempo juntos sería mejor que otra cosa.

—A ver ¿Y como te fué hoy con tus cosas? —preguntó Hoseok interesado, mientras ambos seguían caminando.

—Pues me fué bien, tuve que juntarme con alguien para poder entregarle un pequeño trabajo que me habían encargado. Aunque fuera de eso todo me salió bien ya que llegué temprano a casa para verte —sonrió—. ¿Y a ti? ¿Cómo te fué hoy, sol?

—¡Muy bien, Yoonie! Fué divertido ayudar a un chico a escoger una prenda de vestir que combine con el pantalón que había elegido anteriormente. Era tan gracioso ver sus ojos de confusión cuando analizaba cada una de las camisas y suéteres que tenía en frente —rió un poco recordando aquello, lo cuál hizo que Yoongi también riera.

Ambos llegaron al pequeño restaurante y tomaron asiento en una mesa que se encontraba en una esquina, que tenía un par de luces tenues azules alrededor. Y también estaba cerca de uno de los puntos en dónde se escuchaba un poco más la música. Así que para ellos esa era la mesa perfecta.

—Oh, señores Min y Jung —dijo una chica de cabello rosa y rizado, ella era la que los atendía casi siempre que llegaban a ese establecimiento—. ¡Es un gusto verlos de nuevo por aquí! —sonrió—. ¿Que pedirá el día de hoy la pareja más linda? —preguntó sacando su libreta para apuntar las órdenes.

—¡Oye! ¿Cuántas veces te hemos dicho que no nos digas "señores Min y Jung"? Tenemos casi la misma edad —aclaró Yoongi con gracia.

—Deja mi introducción elegante ¿quieres? Yo tratando de ofrecerles un buen servicio para que se sientan cómodos y luego me vienes con eso —puchereó viendo a ambos chicos en la mesa.