Agosto de MPREG

Cordon umbilical/Nombre

Percy se relajo más contra los brazos de su madre y Jason, el llanto de su bebé pasó a segundo plano. Todo a su alrededor parecía ponerse borroso.

-Esta llorando-Jason igual empezó a llorar, sintiéndose abrumado por la situación y por la realización de que era padre otra vez, hasta bloqueó el dolor de su mano.

-Felicidades. Es un niño-anunció Kayla, la hermana de Lee, sacando con cuidado al bebé del agua, alzándolo para que lo pudieran ver.

El pequeño se retorcía, llorando y abriendo sus manitas.

-Mi bebé-dijo débilmente Percy, estirando sus manos para recibirlo.

-Aquí tienes Percy-lo dejo contra su pecho.

-Mi bebé-repitió, suspirando de alivio al sentir su cabeza contra su pecho-. Un niño.

-Tiene tu pelo negro-murmuro Jason, besando su mejilla.

-Estoy muy orgullosa de ustedes-dijo Sally, observando a su nuevo nieto.

-Papá por tercera vez-llamó Lee.

-Dime-Jason levantó la vista de su hijo.

-¿Quieres cortar el cordón umbilical?

Asintió, besando la cabeza de Percy, quien se quejó un poco al sentirlo alejarse.

Lee le entregó unas tijeras. Lo corto con su mano buena, marcando la separación definitiva entre Percy y su hijo, físicamente hablando.

-¿Apretó muy fuerte?-cuestiono Kayla al verlo sostener su mano.

-Creo que me la rompió-dijo bajito para que Percy no escuchara.

-Pasa más de lo que crees. Deja que Kayla te revise mientras yo termino de ayudar a que salga la placenta.

Kayla lo llevo a otra esquina de la sala, usando un poco de su magia de Apolo, lo reviso y vendo en tiempo récord.

-Déjalo así por un par de días y ya estarás bien.

-Gracias.

-Jason-llamó feliz Percy, haciendo que regresara a su lado en un instante-. Jason, mira, quiere abrir sus ojitos.

-Es tan chiquito.

-¿Qué hace?-preguntó Percy al verlo tocar cualquier parte de su cuerpo que sus manitas alcanzaran.

-Esta reconociendo a su mamá-explicó Sally, sin poder apartar la vista del pequeño.

-Ow, hola mi amor-saludó con los ojos húmedos-. Mi bebé.

-Hiciste un gran trabajo-felicitó Jason, besando su mejilla. Bajando su mano no vendada para poder tocar a su hijo, a pesar de que seguía sucio.

El bebé reaccionó de manera positiva al sentir el tacto de su papá.

-Chicos, vamos a llevarnos al bebé para que puedan limpiarlo.

Percy hizo una mueca, sin emocionarle la idea, solo quería quedarse ahí y abrazarlo.

-Tranquilos, estará bien. También hay que limpiarte a ti para que puedas descansar un poco, cuando despiertes podrás estar con él y tus otros hijos.

-Con cuidado, está muy chiquito-Percy dejó que se lo quitaran, pero se arrepintió al oírlo llorar en cuanto dejo de sentir a sus padres-. Tengan cuidado-pidió de nuevo.

-Él estará bien-tranquilizó Sally, acariciando a Percy-. Jason, ¿por qué no vas a decirles las buenas noticias a los demás?

-En seguida regreso-besó una última vez la frente de su novio.

Sally se quedó en su lugar, abrazando y calmando a su propio hijo.

Jason salió casi dando saltitos. Regreso a la habitación que no estaba muy lejos de la sala de partos. No se sorprendió de ver a todos sus amigos ahí.

-¡Papá!

Hazel y Nico corrieron hasta él, llamando la atención de los demás.

Fue bombardeado con preguntas rápidas en menos de tres segundos.

-Oigan, tranquilos-pidió, cargando a sus dos hijos en cada brazo, evitando lastimar más su mano.

-¿Cómo está mi hijo?-preguntó Poseidón.

-Excelente-sonrió-. Todo salió muy bien, el agua ya está ayudando a curarlo. Sally se quedó con él.

-¿Y el bebé?-insistió Thalia.

-Igual de bien.

-No nos tengas con la intriga-dijo Leo ansioso-. Ya dinos qué es.

-Tuvimos un niño-anunció emocionado.

-¡Hemano!-gritó feliz Nico.

Todos lo felicitaron, igual de alegres por saber que los dos estaban bien. Y aún más impacientes por conocer al recién llegado.

-¿Ahora si podemos saber el nombre del pequeño?-preguntó Annabeth.

-Claro, porque en unos momentos ustedes también van a poder conocer a Charlie Grace-Jackson.