SIGUE A TU CORAZÓN 💛

Capítulo 35

NECESITO SABER QUE PIENSAN DE ESTE CAPÍTULO, PERDÍ LA MENTE AL ESCRIBIRLO. ASÍ QUE COMENTEN POR FAVOR. ESTOY ALUCINANDO. A DISFRUTAR. GO, GO, GO.

-Tú crees que yo sí puedo, -levante tanto mi voz que esta vez Mew si miro mi rostro, con sus mejillas sonrojadas, no esperaba mi ataque, pero no pude detenerme, tenía que expresar todo lo que había retenido por tanto tiempo, era hora de detener a Mew, o seguíamos adelante o me dejaba por mis cicatrices, pero en este momento en definitiva algo tenía que pasar, -no Mew, -grite todo, -no puedo soportarlo, -cerré en puños mis manos y golpe su pecho para que se alejara, -no puedo ni verme en un espejo, del asco que me da mi cuerpo. -seguí golpeado su pecho haciendo que retrocediera, pero no me soltaba así que me llevaba con él, alejándonos de la puerta pero no me podía detener, nunca había sido agresivo o respondido ante los golpes porque la respuesta de mi padre es peor -De la impotencia de no poder borrar estas marcas, de lo inseguro que me siento, -todo eran resentimientos, amargura que escupía en la cara de Mew, sin llorar, no tenia lagrimas para esto, no estaba triste, estaba asustado, dolido, tenia mucho, mucho miedo, -del miedo que tengo que me veas, siento tanto miedo que me vean estas cicatrices, y se den cuenta que estoy roto, -deje de golpearlo, estaba temblando todo el cuerpo, no podía controlar mis manos, ni cerrarlas en puños, agarre la camisa de Mew con una mano y lo apunte en el pecho, volviendo a sus ojos, ¿Por qué esta vez no está llorando?, ¿no le duele lo que me pasa? -porque no solo están en mi piel, están en mi alma Mew, -me señale el pecho y puse mi mano en mi corazón, sentía que estaba demasiado acelerado, cada vez que latía sentía un dolor en el pecho, tan fuerte que me estaba quedando sin aire, -estoy destruido, -respire profundo, para calmarme, pero no pude, estábamos en medio de mi habitación con un silencio, Mew esperando por lo que yo iba a decir, así que deje de gritar y hable con la voz rota, con dolor en la garganta, -y no puedo dejar que tú me veas, y me mires con asco o repulsión, no podría soportarlo. Me moriría, esta vez Mew, si me muero...

No termine de decir mis miedos cuando Mew, me beso.

No me moví, me quede quieto y lo deje callarme con un beso, estaba desesperado, se movían sus labios sobre los míos rápido, temblando, pero no le conteste, no quería, no podía dejarme distraer, el dolor estaba quemando mi pecho, seguí de pie dejando que me asaltara, sus manos no me soltaron, me sujetaron más fuerte de la bata y pego su cuerpo al mío, con ojos abiertos me sorprendí por lo que sentí en mi vientre presionando, era la primera vez que Mew perdió el control de su cuerpo, y sentí su erección firme contra mí.

Relaje mi cuerpo cuando me sorprendí, así que Mew aprovecho la situación y me empujo contra la pared, y volvió a apretar su cuerpo sobre el mío, tan firme que no podía moverme, si lo hacia rosaba su erección, esto era una locura, seguía con mis ojos abiertos cuando apretó sus labios en mi cuello y beso fuerte, tanto que sentí la sangre acumularse en la piel y el dolor atravesar mi mente nublada, trate de separarlo, puse mis manos en su pecho y empuje pero no tenia fuerza, no tenia voluntad para separarlo, sentí la marca fuerte en mi pecho cuando se separó, sus ojos buscaron los míos; se veían oscuros, ¿deseo? ¿enojo? No sabia que era, pero Mew era brusco, sus manos tomaron mis manos fuertes y la llevo arriba de mi cabeza acorralándome, su rodilla fue a las mías y las abrió para ponerse en medio de mis piernas, restregado en mi cuerpo sensible toda su erección.

Me voy a desmayar, ¿Qué es esto? Mew perdió la razón, como es que esta actuando de esta manera. Mi piel se sintió calentar, igual que la de él, justo en el lugar donde su erección me tocaba, y fue peor cuando soltó mis manos y yo no pude bajarlas, como si aun estuvieran siendo sostenidas, las deje sobre mi cabeza con mis muñecas juntas.

Deslizo sus manos por mis brazos quemando mi piel, y las dejo sobre mis caderas levantando mi cuerpo lentamente contra la pared, abrí mas mis muslos y dejé que se posicionara en medio, cuando sentí su miembro contra el mío, desperté.