Different Love [En Edición]

Capítulo 2: ¿Kurt?

Tommy

—¿Dereck? ¿Te sientes bien? —Lo separé de mis labios.

—Sí, no creo aguantar hasta llegar a casa, vamos a un hotel cerca de aquí. —Desde que se subió al auto no paró de besarme y aunque lo que decía era sucio me excitaba muchísimo.

—Conduce. —Él sonrió complacido y en cuestión de minutos estacionamos el auto.

No estoy muy seguro de cuánto tiempo condujo, pero el hecho es que ni él ni yo podíamos retenernos más. Fue una verdadera tortura el registro en la recepción, nunca había estado tan deseoso por una estúpida llave.

—¡Ah! —Me empujó dentro del elevador del hotel

—Shh, no gimas tan fuerte. —Dereck empujó muy suavemente hasta que mi espalda tocó el frío metal del ascensor. Me besó y su lengua tomo el control de la situación, con cada cambio de posición mi deseo crecía.

Él separó mis temblorosas piernas poniendo su rodilla en medio y se frotó conmigo haciendo que mi cuerpo reaccionara inmediatamente.

—Ngh... —Fue a por mi cuello y comenzó con tiernos besos para después acariciarlo con su lengua. Maldición, esto se siente realmente bien.

—Ya no tuve tiempo de decirte. No tengo nada, estoy sano —Sonreí, de cualquier forma en este momento no me interesa si tiene o no tiene VIH.

Metió su mano derecha dentro de mi camisa y provocó que dos botones se deshicieran, subió sus dedos acariciando todo mi torso y jugueteó con mi pezón.

—De-Dereck... —Mi rostro estaba completamente rojo, él tomó mi brazo y sostuvo muy fuerte contra la fría pared.

Las puertas del ascensor se abrieron y yo me asusté cundo vi a una pareja tomados de la mano y poniendo su peor cara al vernos.

—¿Pero qué cara...? —Dereck me sacó de ahí aun besándome y les enseñó el dedo medio a esos dos, sonreí sobre sus labios al igual que él. Hoy estaba extraño, siempre es un pervertido-ninfómano-sin-remedio, pero hoy en especial estaba emocionado, a tal grado que casi no llegamos a este lugar y lo hacemos en el auto.

Con dificultad abrimos la puerta de la habitación y nos adentramos en la obscuridad.

Él me empujó hasta que la parte trasera de mis rodillas tocaron la orilla de la gran cama, se arrodilló y tomó mis caderas.

—¿Qu-Qué haces? —Me lanzó una mirada que volvería a cualquier homófobo, gay.

Rápidamente deshizo con sus largos y ágiles dedos el botón de mis jeans, el zíper se bajó sólo por la presión, se pasó la lengua por el labio inferior y de un tirón bajó mi bóxer.

Respiré entrecortadamente y él sonrió. Muy lentamente se metió mi miembro en la boca.

—¡Ah! — Chillé

Esto jamás me lo había hecho, pero se siente muy bien. Moví un poco mis caderas y cubrí mis labios con el dorso de mi mano para evitar despertar a todo el hotel.

Poco a poco fue aumentando la velocidad, y con ella se iba mi autocontrol. Sin darme cuenta tomé su cabeza acariciando su suave cabello y lo alenté a que fuera más rápido. Al principio puso un poco de resistencia, pero después dejó que yo lo guiara.

Dejó de moverse y lo sacó para lamerlo. Dios... esto es tan pervertido, él es un pervertido.

—Dios... —Susurré contra mi mano.

Estaba a punto de correrme pero ¿Qué se supone que debo de hacer? ¿Lo hago en su boca? Maldición, debo de mejorar en esto.

Dereck aumentó la velocidad y aunque estaba totalmente abochornado arqueé mi espalda y exploté en un grandioso éxtasis.

Jadee intentando recobrar el aliento y miré a Dereck, por la comisura de sus labios resbalaba una gota de líquido blanco.

—Me alegra que te gustara — Enterré mi ruborizado y apenado rostro en su cuello y él me abrazó.

Regresó a mis labios y lentamente nos acostamos en la suave cama, él me quitó la camisa y yo intenté hacer lo mismo con la de él, pero como siempre, no pude y terminó sacándosela por la cabeza

—Te quiero tanto— Susurró contra mi clavícula, un escalofrío recorrió mi espina dorsal y solté un suave gemido.

Dereck se quitó el pantalón junto con su ropa interior y separó mis piernas bruscamente, acarició mi muslo derecho y me penetró de una estocada.

—¡Auch! M-Me dolió — Parece que no me escuchó y empezó a moverse muy lentamente.

Amo esto. Amo como es conmigo. Amo hacer el amor con él. Lo amo.

Aumentó la velocidad y profundidad de sus embestidas haciéndome gemir aún mas fuerte que antes.

Aunque es muy difícil que un hombre este nuevamente excitado después de correrse, conmigo no hubo ningún problema, por un momento pensé que ardería de tan caliente que estaba.

—De-Dereck... —Chillé cuando la cabecera de la cama comenzó a chocar con la pared, apuesto a que alguien se estaría divirtiendo al escucharnos.

—Déjate venir —Y con esas palabras salió toda mi excitación manchando nuestro abdomen. Él se dejó caer sobre mí, aplastándome.

—No... No puedo respirar... —Susurré tomando el poco aire que me entraba.

Él se hizo a un lado y recargó su cabeza en la almohada junto a mí. Sus perfectos ojos azules me observaron detenidamente hasta que poco a poco el sueño fue venciéndonos.

Pasó su brazo por mi torso y me acercó a él de forma posesiva, con los párpados bien cerrados plantó un tierno beso en mis labios

—Te quiero, Kurt

Espera... ¿Qué? ¿Kurt?

¿Kurt?